El Algarve y Canarias, como destinos clásicos, y las Azores, en plena campaña promocional y con una oferta con vuelo directo desde Santiago, como novedad, copan las preferencias de los pontevedreses que han decidido viajar en Semana Santa. Buscan el sol tras un invierno especialmente lluvioso, al igual que buscan el buen tiempo los pontevedreses que han decidido subirse a un avión para dirigirse a Málaga o Valencia, dos ciudades conectadas sin escalas y por compañías de low cost.

Esta conexión directa y de low cost es la que buscan también aquellos que se decantan por capitales europeas: en esta ocasión Roma de manera preferente, pero también Londres, París y Amsterdam. Un servicio que encuentran en el aeropuerto de Oporto (Portugal) con el que trabajan cada vez más las agencias de viaje locales y al que se dirigen de manera creciente los internautas pontevedreses.

"Son pocos días y la gente quiere llegar al destino lo antes posible, las escalas alargan el tiempo del viaje y sobre todo lo encarece" explican fuentes del sector de las agencias de viaje pontevedresas, en las que constatan un "cierto repunte" en las ventas respecto a la Semana Santa de hace un año. Eso sí las reservas son más contenidas que en años de bonanza: son en su mayoría salidas de tres o cuatro días, protagonizadas por parejas o grupos de amigos, y en las que se prima el precio sobre la calidad del servicio.

Una excepción la constituyen los paquetes turísticos, de cinco o siete días, a Canarias que son contratados sobre todo por grupos familiares.

Las opciones por las que se decantan de manera preferente los pontevedreses que saldrán de la ciudad durante la presente Semana Santa conllevan un desembolso medio de entre 350 y 500 euros por persona.

Proximidad

Los viajes de media distancia propios de la época se intercalan con los desplazamientos de proximidad, en general más económicos, a otras provincias gallegas, al norte de Portugal, a Asturias y en menor medida a algunas capitales de Castilla León como Salamanca, Valladolid o León.

En este capítulo de desplazamientos de proximidad el sector incluye las estancias en Madrid, habituales en todos los puentes del año y en muchos fines de semana. En este caso los habitantes de la ciudad del Lérez llegan a la capital con reservas para espectáculos musicales, obras de teatro y museos en el bolsillo.