Las obras de reforma de la calle Santa Clara, reanudadas hace unas semanas, se centran en la actualidad en el frente del convento, aunque sin acercarse al monumento, como ordenó en su día la comisión territorial de Patrimonio. Se trata únicamente de instalar, por la acera contraria al edificio de las Clarisas, las tuberías subterráneas, con el fin de dar continuidad a los servicios y poder proseguir los trabajos en el tramo siguiente.