La posibilidad de que un camino de Samieira, el que pasa por detrás de la antigua escuela de Tarrío, sea declarado público ha reavivado la polémica dos años después de que se produjese el primer intento. La oposición municipal y también vecinos de la zona recelan del porqué y ven en esta segunda propuesta una artimaña del gobierno local para favorecer intereses particulares.

El PP rechaza que la vía, "que apenas es un camino", pueda ser declarado de utilidad pública, pero al mismo tiempo reconoce que "no se puede negar a un ciudadano que recurra a los cauces legales para solicitar una información". Unas palabras con las que el portavoz de los conservadores, Ángel Moldes, se refiere al proceso de investigación al que se va a dar inicio desde el Concello y que fue solicitado por un particular.

Por su parte, vecinos de la zona ven en esta solicitud "una artimaña" con el fin de que esa declaración pública del camino de vía libre a la opción de construir en una parcela en la que querría edificar un familiar de la teniente de alcalde, Chelo Besada, y del concejal Xosé Luis Martínez. Fue el pariente de ambos quien en 2012 realizó la solicitud que, al ser abordada en pleno, obligó a que ambos ediles se retirasen para no poder votar.

"De entonces a ahora lo único que ha cambiado es la artimaña; para que los dos concejales no tengan la obligación de abstenerse de votar, el solicitante es ahora un constructor", explican residentes en la zona. A ello agregan que el constructor es un allegado de quien solicitó la utilidad pública en un primer momento.