Vecinos y comuneros de los montes de San Xulián y Vilaboa denuncian el abandono que sufre el parque de Castiñeiras y el entorno de Cotorredondo, que se ha evidenciado especialmente durante este verano. La falta de mantenimiento y la afluencia de visitantes han originado la acumulación de basura en la zona, así como daños en el mobiliario público instalado en las áreas de recreo, que unido al crecimiento de la maleza ponen en riesgo los montes de la zona, en caso de originarse un incendio.

Las comunidades de San Xulián y de Vilaboa coinciden en señalar que el "abandono" del parque se viene produciendo especialmente desde que la Xunta sustituyó al guarda forestal que se había encargado de esta zona durante los últimos treinta años. El nuevo servicio de vigilancia del parque, dependiente de Medio Rural, no atiende las tareas de limpieza o desbroce -explican los comuneros-, por lo que el cuidado del entorno se ha degradado enormemente.

Gaviotas

Los denunciantes explican que la acumulación de basura y restos de comida en las áreas de recreo se demuestra con la aparición en la zona de bandadas de gaviotas, que hasta ahora no frecuentaban estos montes y que desde hace un tiempo acuden habitualmente a rapiñar los residuos orgánicos que se acumulan tanto en contenedores y papeleras como fuera de ellos. Esta nueva especie que ha irrumpido en el hábitat de Cotorredondo tiene otra consecuencia lamentable para el entorno. Las gaviotas atacan y matan a los polluelos de los patos que viven en esta laguna, además de otras especies que también anidan o crían en los alrededores del parque.

Las comunidades de montes de la zona, las de San Xulián y Vilaboa principalmente, realizan sus propias labores de mantenimiento y limpieza, pero "el mayor problema se encuentra en las tomadas particulares; hay muchas zonas privadas que llevan años sin una limpieza o una corta y ahí está el principal riesgo", explica Manuel Estévez, de la Comunidad de Montes de San Xulián.

Esta agrupación ha realizando un saneamiento de sus montes antes de que comenzase la temporada de verano, si bien coincide con la vecina comunidad de Vilaboa en que es urgente un plan de mantenimiento por parte de Medio Rural de la Xunta en los alrededores del parque de Cotorredondo. "Ahí está todo un poco desastroso, no lo tocan para nada", afirma Estévez en referencia a la consellería.

También el presidente de la Comunidad de Montes de Vilaboa, Xabier Míguez, explica que este colectivo se ha encargado de reponer alguna de las mesas de piedra rotas en el área recreativa, aún siendo una tarea que debería asumir Medio Rural.

Míguez coincide con los responsables de San Xulián en denunciar el abandono y la falta de limpieza en los alrededores de Cotorredondo, así como el deterioro de barbacoas, bancos y mesas, que no se reparan a medida que se deterioran.