La avería de la caldera de recuperación de Ence ocurrida el pasado domingo quintuplicó la emisión media a la atmósfera de dióxido de azufre (SO2) del último mes, tal como reflejan los datos ambientales colgados en la web de la compañía. Ese día, cuando la empresa reconoce ahora que se produjeron no uno sino dos "episodios olorosos" -uno de 40 minutos y otro de 10 a las cinco y a las nueve de la tarde respectivamente- , la fábrica de Lourizán registró un pico de 129 mg/ nm3 (miligramos por metro cúbico) de SO2 frente a una media de 26 contabilizada desde el 13 de julio.

Los dos días anteriores al incidente el índice se situaba en seis y a lo largo del mes se habían alcanzado otros tres picos: de 75 mg/nm3 (el 3 de agosto), de 80 (el 23 de julio) y de 63 (el 12 de julio). Son cifras, en todos los casos, situadas por debajo del límite de emisión permitido por la AAI (autorización ambiental integrada), que es de 200, lo que lleva a Ence a destacar que "el centro se ha mantenido dentro de los valores marcados por la normativa vigente".

Para asociaciones ecologistas como Defensa da Ría no estamos solo ante una cuestión de legalidad sino de un posible daño a las personas. En la tarde-noche del pasado domingo la Policía Local y el 112 recibieron varias llamadas de vecinos del sureste de la ciudad (Eduardo Pondal, Juan Carlos I, A Parda) alertando de un olor "intenso y desagradable" y que estaban sufriendo irritaciones oculares y respiratorias

La dirección de Ence subrayaba ayer que los "episodios olorosos" como los registrados el pasado domingo "no han podido ser causa de afección respiratoria alguna, ni tienen ningún otro tipo de consecuencia para la salud" aunque, obviamente resultan desagradables al olfato.

Las afirmaciones de la empresa no son óbice para que existan estudios médicos que acreditan la relación entre una sobre exposición al dióxido de azufre y el aumento de irritaciones oculares, de garganta y vías respiratorias, lo que se acentúa en personas con patologías como el asma o afecciones respiratorias previas,

Ence recuerda que tienen entre sus planes prioritarios para la fábrica pontevedresa la eliminación de olores con el objetivo de alcanzar el nivel cero en el 2014.