El turista se dirige por la PO-308 y empieza a seguir las indicaciones que le llevan a un prometido mirador sobre Combarro y la ría de Pontevedra. Pero en O Loureiro se encuentra con algo que ya no admite esa denominación de oteador. Aunque se inauguró hace menos de un lustro, lo que se puede observar desde allí es una gran masa forestal compuesta de eucaliptos en su mayor parte por eucaliptos. El visitante tendrá que conformarse con su imaginación para situar sobre la geografía los puntos de interés que se destacan en un gran mapa que reproduce el panorama que se esconde tras las copas de estos ejemplares.

Este mirador, debido a las impactantes vistas que ofrecía, está recomendado en diversas webs de turismo. También la propia página municipal anima a visitar este espacio. Sin embargo, la ausencia de los cuidados necesarios ha hecho que se pierda gran parte de sus atractivos y que quien se acerque hasta esta terraza natural de O Loureiro se tenga que ir con una cierta decepción.

Ésta fue una de las cuatro zonas en plena naturaleza que el Concello de Poio rehabilitó recientemente junto con los miradores de Campanario, Pedra da Ra y el entorno de la Cuna da Moura. Una actuación que contó también con la colaboración de los comuneros. A pesar de que su realización es reciente, culminados en el cambio de la década pasada a la actual, en algunos de los casos como es el de O Loureiro se ha perdido la razón de ser de su construcción.