Los trabajadores de la concesionaria de limpieza de Marín (Urbaser) iniciarán una huelga de duración indefinida en el mes de julio, si la empresa no se sienta a negociar el convenio colectivo. Los 16 trabajadores de esta concesión explican que pasarían a cobrar 800 euros mensuales y a perder muchos derechos en materia social, si se aprueba sin negociación la propuesta de la dirección, que consiste en una rebaja del 13 por ciento del salario actual, además de otras medidas, como reducción de turnos de descanso y vacaciones, entre otras cuestiones.

Los empleados iniciaron ayer una serie de concentraciones ante la sede de la empresa en Marín y mantendrán las protestas mientras la dirección no se siente a negociar un nuevo convenio. En caso de llegar así al mes de julio, iniciarían una huelga indefinida, que además de la propia plantilla afectaría a todos los vecinos de Marín.

Fiestas de julio

En julio están previstos varios eventos en la villa, como una concentración motera, una fiesta gastronómica, una feria multisectorial y las tradicionales fiestas del Carmen, que se toparían con la falta de recogida de basura en las calles.

Javier Castro, delegado de Personal de Urbaser, indicó que en estos momentos las negociaciones están rotas por parte de la empresa, por lo que los trabajadores piden a la dirección que se siente a negociar "de buena fe". Confían en que se avenga a dialogar, para no perjudicar a todos los vecinos de Marín. Los trabajadores explicaron, al iniciar este calendario de movilizaciones, que la actitud de la empresa ha sido "muy cerrada desde el principio, de falta de respeto a los trabajadores". El portavoz sindical afirmó que la dirección de empresa argumenta dificultades económicas, basadas en incumplimientos de pago por parte del Concello, que el sindicato CCOO y los trabajadores niegan.