La Policía Local de Pontevedra puso en marcha el pasado año un total de 20 campañas específicas de carácter preventivo. Destacan, por ejemplo, las que tenían como objetivo garantizar la seguridad de los transportes escolares y de mercancías, controlar el uso del cinturón, control de la zona peatonal, uso de los aparcamientos de carga y descarga o las habituales campañas para evitar la conducción bajo los efectos del alcohol.

En este último apartado cabe destacar que casi se duplicaron el número de controles estáticos realizados, un total de 5.500, en los que 181 conductores dieron positivo. Esto supone una tasa de alcoholemias positivas de un 3,3%, lo que supone un descenso de seis décimas frente al 3,9 de 2011. Hubo también 18 positivos por drogas.

A los controles estáticos hay que sumar los dinámicos que se realizan, por ejemplo, como consecuencia de un accidente o una infracción. En total, en Pontevedra se registraron 345 alcoholemias positivas, de las que 145 acabaron ante el juzgado por tratarse de un delito.

De hecho, la conducción bajo los efectos del alcohol coparon la mayor parte de los delitos contra la seguridad del tráfico tramitados por la Policía Local, que fueron un total de 214. El resto de los imputados lo fueron por conducir pese a carecer del permiso de conducir o no someterse a la prueba de la alcoholemia, además de un único caso de conducción temeraria.

Los delitos contra la seguridad viaria también son la mayoría dentro de los atestados realizados por la Policía Local de Pontevedra, seguidos de 39 robos y hurtos, 12 de tráfico de drogas, y 8 de violencia de género y atentado.

También se impusieron 173 sanciones por consumo de bebidas alcohólicas en la calle, ruidos, u ocupación de la vía pública y 80 por animales domésticos, así como otras 181 por alteración del orden público.