La corporación de Marín acordó ayer apoyar la manifestación que los afectados por el cierre del caladero de Mauritania han convocado para el próximo viernes 24, así como "ejercitar más presión" y "tratar que los eurodiputados tengan presentes todos los datos para que apoyen esta justa reivindicación", según explicó la alcaldesa, María Ramallo, quien reconoció que éste conflicto es "un grave problema que pone en riesgo una parte importante de la economía del municipio".

Esta medida conjunta se adopta de cara a la votación que tendrá lugar en Bruselas a finales de este mes y en la que, en caso de confirmarse el convenio vigente, ya nada podrá hacer la flota cefalopodera gallega para regresar al caladero africano.

El secretario de CIG-Mar, Xabier Aboi, y varios tripulantes y armadores mantuvieron un encuentro ayer con los diferentes portavoces municipales a los que solicitaron, en primer lugar, que todos los grupos municipales manifiesten su apoyo público a la protesta que se desarrollará el día 24. Igualmente, los convocantes solicitarán el respaldo del comercio y la pequeña empresa, un colectivo al que pedirán un cierre puntual para dicho día desde las ocho de la tarde.

En segundo término, los afectados exigieron a la corporación que "ejerza una mayor presión a la Xunta" para que esta administración "aparezca de una vez por toda", según detalló Aboi, quien recordó que "los canarios ya están llegando a acuerdos con los mauritanos, mientras que nosotros seguimos igual". "No notamos ningún avance, el único que pudo haber fue el que nosotros mismos fuimos haciendo", añadió.

En este sentido, el sindicalista volvió a denunciar el abandono que, según él, sufren los afectados gallegos por parte de la Consellería de Medio Marino y del Ejecutivo central, una circunstancia que pusieron de manifiesto ante los diferentes portavoces municipales, señalando principalmente a la formación del Partido Popular, que se comprometió a "hacer gestiones" ante tal administración.

Así pues, al igual que ha ocurrido con los afectados por las participaciones subordinadas y preferentes, la flota recibirá el apoyo de todos los partidos municipales. A pesar de ello, Aboi lamentó que el respaldo "se quede en los concellos y no llegue hasta Santiago", ya que "quien gobierna es la Xunta".