Aunque se declaran "preocupados" por lo que consideran una alfombra roja a la permanencia de Ence en Lourizán, también ven un lado positivo al giro del discurso del PP ya que con el "se quitan la careta", tal como subrayó en su momento el alcalde de la ciudad, Miguel Fernández Lores. Lo que desvela es un rostro que no gusta al líder del Bloque Nacionalista, Xavier Vence, por lo que supone de engaño a los ciudadanos y en especial a los de Pontevedra en donde, recuerda, existe una sensibilidad "contraria y generalizada" a la continuidad de la factoría de Lourizán más allá del año 2018.

Había sido precisamente la constatación de esta sensibilidad la que llevó al candidato del PP a la alcaldía en el año 2007, Telmo Martín, a incluir en su programa electoral una propuesta de ubicación alternativa. Desde ese año los populares habían defendido el traslado como única opción.