La Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra ha señalado para hoy el juicio contra cuatro personas acusadas de delitos de detención ilegal, de inducción a la prostitución a una joven rumana, e incluso uno de ellos de violación.

La procesada A.C.I., con pasaporte rumano, según sostiene la Fiscalía, actuando "con la intención de atentar contra la libertad sexual y personal de su prima", nacida en mayo de 1987, "así como con ánimo de obtener beneficio económico de carácter ilícito procedente de su explotación sexual", la convenció para que se trasladara desde Rumanía a España con la falsa afirmación de que podría trabajar de camarera.

De modo que, según relata la Fiscalía, en agosto de 2010 la acusada acompañó a su prima en el autobús hasta Galicia convenciéndola, además, para que le entregase su documentación personal.

Durante un mes residieron en Pontecesures donde compartieron residencia con la pareja de la acusada, un hombre que responde a las iniciales A.R.C., y con antecedentes penales por violencia de género. Pasado ese tiempo se trasladaron a Málaga a trabajar en un club de striptease "supuestamente como bailarinas", aunque, según la Fiscalía, al llegar la acusada "obligó a su prima a ejercer la prostitución".

"La acusada obligó a su prima pegándole en varias ocasiones y le dijo que se olvidase de Rumanía", recoge el escrito de la Fiscalía. El escrito de calificación detalla que durante todo el tiempo que estuvo en el club de Málaga la acusada era quien recibía el dinero que la víctima ganaba ejerciendo la prostitución.

Dos semanas después se trasladaron a Galicia y en el domicilio de Pontecesures la víctima fue supuestamente agredida sexualmente por el compañero sentimental de su prima. Iniciándose una situación de "constante vigilancia", por la que la encerraba con llave durante unos días en el piso de Pontecesures y la trasladaba a diferentes lugares para ejercer la prostitución como un piso de Santiago de Compostela, dirigido por los también acusadas M.C.L.M. y su hija P.C.G.L.

Estas dos últimas acusadas, madre e hija, actuaron según el fiscal "a sabiendas de la situación de dominio y superioridad" que había sobre la víctima.

La Fiscalía entiende que la prima de la víctima y su pareja sentimental son autores de un delito de detención ilegal y otro de inducción a la prostitución, así como de otro de detención ilegal, por los que pide para ella un total de ocho años y medio de prisión y dos años y seis meses para el resto de procesados.