La soleada jornada de ayer, previa a una nueva llegada de las lluvias, llenó las playas de la ría, muy animadas durante todo el día. Pero esta avalancha a los arenales provocó, en el regreso vespertino, los primeros atascos de la temporada en la carretera PO-308 entre Sanxenxo y Pontevedra. Las colas fueron más llamativas en Combarro y otros puntos de Poio.