La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Pontevedra estrenará el mes de abril juzgado a los integrantes de una red que presuntamente intentó introducir en la ciudad de Pontevedra una importante cantidad de cocaína por vía aérea. La droga tenía su origen en la República Dominicana. La vista oral está previsto para el próximo 4 de abril y el fiscal solicita una pena de prisión de 5 años y tres meses y multa de 100.000 euros para cada uno de las cuatro personas que se sentarán en el banquillo de los acusados.

Uno de ellos es un vecino de Poio, Juan Manuel G. C., quien supuestamente actuaba como "mula" de la organización. Fue interceptado a finales de 2011 en el aeropuerto de Barajas con algo más de un kilo de cocaína encima. Según el Ministerio Fiscal, parte de la droga la llevaba oculta en su ropa interior pero también se le encontraron algunos envoltorios con droga en el interior de su organismo, bolsitas que posteriormente expulsó en un centro hospitalario.

La investigación la desarrolló el Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra. En esta provincia fueron detenidos otros tres supuestos integrantes de la red a quien el fiscal acusa de preparar y organizar el viaje para introducir en España la sustancia estupefaciente. Se trata de otro vecino de Poio, J. M. G. C., y un marinense, E. G. F.; así como a un ciudadano de origen dominicano que supuestamente se ofreció para concertar con los proveedores de droga en la isla caribeña.

Señala el fiscal que, con el objetivo de pasar más desapercibido en los aeropuertos, la "mula" decidió viajar acompañado por su hijo de 11 años.

La Guardia Civil de Pontevedra alertó en el momento en el que se produjeron las detenciones del aumento de personas de nacionalidad española que acceder a realizar el papel de "mulas" en este tipo de viajes.