La sorpresa de la jornada la dio el secretario del club, José Antonio Braña, que hasta ayer permanecía ingresado en el hospital tras sufrir una intervención quirúrgica. Los directivos del Marcón Atlético no contaban con su presencia en la fiesta, pero por sorpresa allí se presentó dispuesto a retomar su vida cotidiana con un buen plato de fabada.

Había pedido a su médico que le adelantara la alta hospitalaria y el facultativo consideró que estaba en condiciones para abandonar el hospital. Y lo primero que hizo Braña fue presentarse en la fiesta de la fabada en cuya organización había colaborado durante las ediciones anteriores. Su llegada al recinto motivó una de las principales celebraciones de la jornada.