La anunciada subida del 32% en la tasa de la grúa, que a partir de mayo pasará de 87 a 115 euros por cada enganche, "está provocando que la gente se suba por las paredes". Así de gráfico se manifestó ayer el portavoz municipal del PP, Jacobo Moreira, para expresar su total desacuerdo con esa medida, derivada de la adjudicación del servicio a la empresa Setex Aparki. Por ello, la oposición votó ayer, en la comisión de Facenda, en contra de este incremento y pedirá en el pleno del próximo lunes que se deje sin efecto y se congele la tarifa actual, que ronda los 87 euros por intervención. Esta congelación supondría que las arcas municipales tendrían que abonar a la empresa unos 20 euros por cada enganche, ya que Setex percibirá por su actuación 107 euros en cada caso.

En principio, la subida saldrá adelante con los votos del BNG y del PSOE y así lo ratifica el propio alcalde, Miguel Fernández Lores al señalar que "este es un servicio que no debería costarle dinero al Concello ni a los ciudadanos que aparcan bien o que, directamente, no tienen coche o no lo usan". En esta misma línea, el concejal de Facenda, Raimundo González Carballo, señalaba hace algunas semanas que "el Concello no va a subvencionar a los infractores".

En cambio, Moreira sí es partidario de que sean las arcas municipales las que asuman la diferencia entre lo que abona el infractor y lo que percibirá la empresa "ya que tanto se presume de que la situación económica del concello está saneada". Aunque en el verano pasado su grupo aceptó la oferta de Setex que implica ahora este aumento, recuerda que "en Pontevedra no hay facilidades para aparcar y si mucha gente estaciona mal es porque no le queda más remedio". Además, asegura que las tasas en otras ciudades no son tan elevadas.

Este asunto será objeto de debate en el pleno del próximo lunes, una sesión que ayer analizó la junta de portavoces y en la que se dará cuenta de la reorganización de comisiones y otros órganos municipales a raíz de la in corporación, hace un mes, de los tres nuevos ediles del PP: Rosa Picallo, Miguel Meijón y Eloisa Nogueira. Además, se abordará la primera gran modificación de crédito del año, por 3,6 millones de euros, y que buen seguro servirá al PP para denunciar de nuevo el retraso del presupuesto de este año, que probablemente quede en el cajón. En la comisión informativa de ayer el PP no se pronunció.

Esos 3,6 millones, procedentes de remanentes de tesorería del pasado año se destinarán a varios proyectos pendientes, en especial diversas obras de saneamiento rural (algo más de 1,25 millones) y para la primera fase de la futura ronda urbana, con 734.000 euros más. También se empleará en cumplir una sentencia sobre viejas obras en la plaza de García Escudero para abonar 294.000 euros a la empresa adjudicataria, y para pagar 230.000 euros en intereses de demora.

Los 734.000 euros de la ronda urbana forman parte de un convenio pactado con la Diputación, pero aún sin firmar, para ejecutar el primer tramo de ese futuro vial entre O Marco y Príncipe Felipe. En su día ya se le transfirieron a la entidad provincial 500.000 euros y ahora se reservan fondos para la anualidad de 2013 y para las expropiaciones de los terrenos. Otros 555.000 euros están asignados a diversas expropiaciones en el parque lineal de Os Gafos, en la zona de O Gorgullón, para adquirir una parcela próxima a otra que también tuvo que comprar el Concello por haberla "usurpado" con anterioridad.