El Consello Asesor del Patrimonio que creó el gobierno local hace unos meses, ultima el plan de trabajo para el año 2013, que se centrará en buena parte en ampliar el catálogo de elementos arqueológicos, etnográficos y arquitectónicos del municipio, que ya ronda las mil piezas tras incorporarse recientemente unas 200 nuevas, sobre todo fuentes, lavaderos, molinos y petroglifos.

Entre los elementos recién añadidos se incluyen piezas descubiertas hace poco tiempo gracias al trabajo de particulares, asociaciones e incluso comunidades de montes, como dos petroglifos y una mámoa en Lourizán, otra mámoa en Mourente y piezas parecidas en Campañó. En el caso de Mourente, se hace referencia a las obras de Acuanorte en el monte do Castro, por lo que se solicitará un control arqueológico estricto. Asimismo, se destaca el hecho de que en interior del recinto escolar de A Carballeira, en Lourizán existe un petroglifo que se acondicionará, al igual que otro en medio de un camino en Campañó.

Así lo apuntó ayer el concejal Luis Bará, que alertó, por otra parte, del "riesgo" que presenta el censo de cruceiros del rural, algunos de ellos con daños o muy abandonados, por lo que se prepara un trabajo específico de conservación que comenzará en las parroquias de Campañó, Santa María de Xeve, alba y Mourente. Además, con colaboración con la Escuela de Restauración se trabaja en la mejora de los cruceiros urbanos de la plaza de la Leña y de las Cinco Calles.

También se adecentarán y limpiarán antiguos puentes, como ya se hizo en Bora, con dos existentes sobre el río de A Gándara, y se pondrán en marcha cinco rutas temáticas urbanas, una de ellas dedicada a la masonería.