Un camarero tiene 50 veces más posibilidades de encontrar un empleo que un programador informático. Este dato lo refleja el último informe de la Consellería de Traballo que sitúa a camareros, vendedores en tiendas y almacenes y personal de limpieza entre los puestos más demandados laboralmente en Galicia a lo largo del pasado año. Las estadísticas aportaban otro dato revelador: de las cien profesiones con más salida laboral, únicamente tres requieren un título universitario: profesores, enfermeros y los ya citados programadores informáticos.

Ante tales expectativas, ¿merece la pena estudiar una carrera universitaria? Según reflejan los datos, la actual situación económica y la redefinición del mercado laboral está generando un aumento en el número de alumnos que optan por matricularse en Formación Profesional en Pontevedra, en el presente curso cerca de 2.200 personas tomaron esta decisión.

"La gente se está dando cuenta de que las carreras universitarias no garantizan nada, que son costosas y que la FP, en cambio, sigue siendo gratuita", reconoce el director del IES Frei Martín Sarmiento, Román Latas Calvo. Precisamente este centro ofrece el ciclo medio de Cuidado auxiliares de enfermería que, junto al grado superior de Educación infantil que imparte el CIFP Carlos Oroza, es una de las opciones más demandadas de los 42 ciclos formativos que se pueden estudiar en los nueve centros públicos de la ciudad.

"Creo que los alumnos adquieren unas buenas competencias para conseguir un trabajo, pienso que es un aspecto que se valora. Puedes hacer una carrera de cinco o seis años y nadie te va a garantizar un trabajo, estudiando FP tampoco te lo garantizan, pero igual haces algo que te gusta y encuentras empleo antes", comenta Latas. En este sentido, el director del centro destaca los ciclos relacionados con la imagen personal, tanto peluquería como estética, como los que más salida profesional están teniendo en la actualidad.

Así pues, ante la cruda realidad que los datos de acceso al mercado laboral reflejan o al futuro aumento de tasas, ¿qué hacer desde la Universidad para seguir siendo una opción atractiva a la vez que práctica para los jóvenes?

"Hay que diferenciar claramente lo que es FP y la Universidad. FP va por una vía técnica, mientras que la Universidad está para que el alumno aprenda y aprenda. Es un grado académico distinto", explica el decano de la Facultad de Ciencias Sociales y de la Comunicación, Juan Manuel Corbacho, quien reconoce que en los últimos años hay muchos alumnos que, tras completar un ciclo de FP, deciden "ampliar conocimientos en la Universidad".

En cualquier caso, los diferentes decanos de las facultades presentes en la ciudad son conscientes de las dificultades que los antes licenciados y ahora graduados tienen a la hora de acceder al mercado laboral y, por ello, se apuesta por una continua adaptación a los nuevos tiempos.

"Nuestras titulaciones, al estar muy relacionadas con los medios de comunicación, están notando la crisis. Pero del defecto hemos hecho una virtud. Son unas carreras muy polivalentes", comenta Corbacho, quien detalla que en los últimos tiempos los alumnos que acaban sus estudios en la Facultad de Comunicación se están especializando en diseño web o en gestionar comunidades online, lo que se conoce como community manager.

Con unos planes de estudios que se revisan cada seis años, la facultad pone en marcha talleres y seminarios con la finalidad de adaptar su oferta docente a las nuevas tendencias. "Desarrollamos los denominados 'Seminarios profesionalizantes', una actividad docente de 120 horas que se desarrolla en los últimos cursos de Relaciones Públicas y Comunicación Audiovisual y a través de la cual abordamos campos como el diseño gráfico, las diferentes técnicas del tratamiento de imágenes o las últimas tendencias en el mundo de la comunicación desde un punto de vista práctico", explica Corbacho.

Así pues, además de la formación teórica que, obviamente, adquiere el alumno durante sus estudios universitarios, las diferentes facultades afrontan el reto insoslayable de prepararlos para su acceso al mercado laboral. "Nuestros planes de estudios tienen una base para enseñar a gestionar de forma sostenible las masas forestales", explica el director de la Escuela de Ingeniería Forestal, Enrique Valero. El responsable del centro detalla que actualmente se está produciendo "una revolución para pasar de una sociedad basada en los combustibles fósiles a los que se denominan biomateriales", algo que, asegura, abre una "expectativas tremendas" para un sector que, previsiblemente, generará "un nicho de empleo importante en Galicia". "Todas las grandes industrias están creando biocosméticos, biofármacos, biodiéseles... Todo basado en productos agrícolas, pero sobre todo forestales", argumenta, "lógicamente, los planes de estudios se adaptan a estos tiempos", añade.

Artistas informáticos

Bellas Artes, la carrera vocacional por excelencia, tampoco es ajena al proceso de reconversión que exigen los nuevos tiempos. "El concepto del pintor o escultor que está en su taller ha cambiado, se sigue haciendo, pero nadie cuando sale de la facultad consigue sustento económico con eso", explica el decano del centro, Juan Carlos Meana, quien detalla que la crisis ha cambiado la salida profesional de los egresados. "Hay una parte que se dedica a la docencia, pero muchos optan por el diseño audiovisual o gráfico, de páginas webs u objetos. También hay mucho autoempleo, como en todas las carreras liberales", comenta Meana. Así pues, desde la dirección del centro se apuesta por evolucionar los planes de estudios hacia las nuevas tecnologías e Internet, "sabemos que la creatividad va por ahí", detalla. "Se está demandando mucho todo lo que tiene que ver con los móviles: videojuegos, diseño, aplicaciones... La colaboración entre artistas de Bellas Artes e ingenieros informáticos es un campo que aún no se ha desarrollado", asegura.

Por su parte, Manuel Gutiérrez, decano de la Facultad de Fisioterapia, reconoce que, "además de tratar de profundizar en las materias obligatorias", desde el centro se pretende "aumentar la oferta de materias optativas que permitan al graduado adaptarse y estar formado para cubrir las nuevas demandas de asistencia". Según los últimos datos que dispone la dirección del centro, publicados por la Agencia para la Calidad del Sistema Universitario de Galicia en 2010, el 63% de los graduados no tardaron más de tres meses en encontrar empleo, no obstante, "aunque no tenemos datos actuales, suponemos que la situación económica del país está influyendo en la empleabilidad de los fisioterapeutas", apunta Gutiérrez.

Por último, la decana de la facultad de Ciencias de Educación y del Deporte, Francisca Fariña, comenta que la enseñanza, en el caso de los grados de Educación Infantil y Primaria, y las actividades municipales deportivas, gimnasios y la preparación física, en el caso del grado de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, siguen siendo las principales salidas laborales para los alumnos que finalizan sus estudios en el centro. En cualquier caso, Fariña reconoce que son "conscientes de que algunos de nuestros egresados no trabajan de lo que han estudiado, pero la formación universitaria siempre abre muchos campos de trabajo".