A pesar de que su empresa ha recibido importantes reconocimientos, Catalina Fernández de Ana se reconocía ayer "nerviosa" antes de recoger un premio, asegura, "especial porque es nuestra propia ciudad, es un orgullo".

"La oleada de incendios de 2006 fue un desastre, nos supuso enormes pérdidas, reflexiones y reestructuraciones", recordó al recibir el galardón, " nos obligó a renacer, creando nuevas lineas de trabajo y de investigación e invirtiendo en nuevos proyectos. Desarrollamos nuevas técnicas de cultivo, experimentamos nuevos sustratos, trabajamos para aprovechar materia prima de nuestros bosques para que no ardan más, mejoramos la imagen de los productos y creamos una potente página web que hoy recibe 1.300 visitas diarias desde todo el mundo".

El departamento de Medio Ambiente Hifas "llevó a cabo", añadió, "importantes restauraciones de la mano de arquitectos como César Portela en la isla de San Simón, pazo Baión o la fortaleza de A Guardia".

"En colaboración con los mejores médicos especializados en micoterapia de Europa desarrollamos una línea de complementos tradicionales y dermocosmética que hoy se vende en 7 países".

En 2011 su empresa creó la mayor base mundial sobre las propiedades terapéuticas de los hongos. Con todo, la promotora de la empresa considera que su mayor mérito ha sido "tener el sueño, tener la ilusión y la fuerza de transmitirlo" y lograr reunir a un "magnífico equipo de profesionales".

"Hifas da Terra es producto de una vida", concluyó, "y de una familia, la familia Fernández de Ana Magán Portela, donde cada uno aportó su enorme grano de arena: la investigación, la internacionalización, la importancia del diseño de producto... A la familia se suma el trabajo, conocimiento e ilusión de toda nuestra gente que da día a día lo mejor de si para que Hifas siga creciendo".