Los datos de movimiento de mercancías correspondientes a 2011 señalan que la mitad del 1,8 millones de toneladas movidas el pasado año correspondían a tráficos generales, en contenedores y la otra mitad a productos agroalimentarios, a granel, si bien la tendencia es que aumente el primer aparcado a costa del segundo. Suárez Costa aventura que 2012 puede ser un año "muy positivo", si bien deja claro que "manteniendo las cifras actuales, no habrá problema para sobrevivir en esta época de crisis".
El secreto está en obtener nuevos mercados. A los ya habituales de abonos y piensos (que subió un 32%) y de pasta de papel (con un aumento de 5,5% hasta llegar a 400.000 toneladas) el Puerto ha incorporado en los últimos tiempos productos como los componentes eólicos (37.000 toneladas) y siderúrgicos (113.000), así como las frutas y hortalizas, que aumentaron un 3,3% hasta rondar las 65.000 toneladas. Y es esta última mercancía una de las que mayor crecimiento promete para este año, con el objetivo de llegar a 150.000 toneladas. Para ello, el presidente de la Autoridad Portuaria recuerda que existen varías compañías ya operando, como Del Monte y Fruta del Pacífico.
Además, se dispone de lineas de la Compañía Chilena de Navegación Interoceánica y, más recientemente, de la naviera MSC, que opera para el Norte de España y Francia desde el puerto panameño de Balboa y que también recala en terminales como Amberes, Rotterdam y Bremehaven.
"Crecimiento sostenido"
El propio Puerto destacó ayer que estos datos corroboran la tendencia de "un crecimiento sostenido". En total, se movieron el pasado año 1.844.946 toneladas. Por grupos de mercancías, en 2011 se mantuvo el volumen de tráfico de mercancía general, alcanzando crecimientos en tráficos clave para el Puerto como las frutas y hortalizas (65.000 toneladas) que subieron un 3,34%, la pasta de papel que subió un 5,53% con más de 400.000 toneladas embarcadas en la Terminal Cubierta, los componentes para aerogeneradores con un movimiento de cerca de 40.000 toneladas o los productos siderúrgicos, con 113.000 toneladas.
En cambio, en el apartado de graneles sólidos, se produjo un descenso de un 11% fundamentalmente ocasionado por la ausencia en 2011 de descargas masivas de astilla de madera con destino a la fábrica de Ence. Sin embargo, se alcanzó un crecimiento del 32,34% en otros graneles como abonos y piensos. Los cereales y sus harinas también aumentaron sus descargas en un 2% así como la sal, que alcanzó un crecimiento del 19%.
En lo que se refiere a los productos pesqueros, el tráfico de pesca congelada se situó por encima de las 120.000 toneladas y el de pesca fresca en 2.033 toneladas, con un valor en primera venta de casi cinco millones de euros.
