El turismo de proximidad se erige, por gusto y por necesidad, en el rey. Los pontevedreses con posibilidades de disfrutar de unos días de asueto fuera de la ciudad optan mayoritariamente por coger su propio vehículo e irse a conocer algún rincón o ciudad de Castilla-León, Asturias o el norte de Portugal – en un sentido amplio ya que se abarca hasta Lisboa–. Pero también, y en número creciente en los últimos años, aprovechan el puente de la Constitución o el de la Inmaculada, según los casos, para hacer rutas por Galicia o acudir a un balneario en busca de relax.

Según indican fuentes del sector en Pontevedra, las estancias medias en estos desplazamientos se sitúan en tres-cuatro noches, aunque se amplían a cuatro o cinco entre aquellos que hacen números y optan por una capital europea: Londres y Berlín, con ofertas de 800 euros para dos personas, y París, por el mismo precio pero con una noche menos, son las estrellas de esta minicampaña de diciembre. "Ha sido más minicampaña que nunca" reconocen en varias agencias de viajes de la ciudad, en las que las ventas de "clásicos" de otros años: una semana en Canarias, un todo incluido en el Caribe (República Dominicana) o la opción de ir a esquiar a Sierra Nevada (Granada), son una excepción.

Excepcionalmente han vendido algún pasaje a Nueva York y a destinos europeos tradicionales, en estas fechas, como Praga, Budapest o Roma.

La elección de Londres y Berlín tiene mucho que ver con la existencia de vuelos especiales directos desde Peinador y Lavacolla que abaratan el precio final del viaje y de ofertas casi permanentes de distinto tipo de alojamientos.

Los balnearios gallegos son, en términos generales. Los grandes beneficiarios de las minivacaciones de diciembre, tanto por la demanda interna como por la que llega de fuera de la comunidad, debido a su amplia y cuidada oferta de programas de salud y belleza, como por su localización y entorno y por sus precios. Parejas y grupos de amigos son sus usuarios más numerosos y fieles.