"No es éticamente aceptable la aplicación de un incentivo asociándolo a un porcentaje de prescripción de fármacos autorizados, como se ha realizado en la Comunidad de Galicia, influyendo además de forma negativa en la valoración del conjunto de los objetivos". Es la contundente conclusión a la que llega la Comisión Central de Deontología del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos que analizó, a petición de la entidad colegial de Pontevedra, la directriz transmitida, por escrito, por el director asistencial del Complejo Hospitalario de Pontevedra (CHOP) a todos los facultativos del centro por la que instaba a la disminución a niveles mínimos de la prescripción de novedades terapéuticas.

Para que estos incentivos sean "ética y deontológicamente aceptables", añade la citada comisión, "tienen que estar orientados a una mejora objetiva de la salud, que su finalidad no sea exclusivamente económica y que no limiten la libertad de prescripción".

El escrito remitido y cuestionado por los profesionales del CHOP definía la categoría de novedades terapéuticas como "nuevos medicamentos que no han mostrado mayor eficacia que los ya existentes y que, sin embargo, han salido al mercado con un precio mayor". Para aclarar cualquier ulterior duda se adjuntaba un listado de la Subdirección General de Farmacia.

El objetivo, señalaba también el escrito, era conseguir que estas novedades terapéuticas queden por debajo del 1,5% de la prescripción de tal manera que los que médicos que no alcancen la meta "no podrán percibir cantidad alguna" del complemento de productividad variable (CPV) del año 2011.

Los facultativos del CHOP se dirigieron a su Colegio Médico en busca de amparo y de esta petición emana el informe aprobado en la sesión de la Comisión Central de Deontología del Consejo General del pasado 26 de noviembre. Este dictamen ha sido remitido por el Colegio Oficial de Médicos de Pontevedra a la conselleira de Sanidade, Pilar Farjas y al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, con el fin de que reconsideren la directriz "éticamente" reprobable de limitar la prescripción de fármacos por criterios de carácter exclusivamente económicos.

En entredicho

La Comisión Central de Deontología defiende que el médico "debe disponer de libertad de prescripción, que le permita actuar con independencia y garantía de calidad". En este contexto la no prescripción de un medicamento "con el objetivo de obtener un incentivo fundamentalmente económico no puede considerarse éticamente aceptable", señalan los expertos de la Comisión, que no dudan en calificar de "incentivo perverso" a aquel que, como el que promueve la Consellería de Sanidade, "premie la indicación de tratamientos que no sean los tratamientos de elección o limiten la libertad de prescripción".

Para la Comisión Central de Deontología "los incentivos deben premiar la buena práctica y no el ahorro sin más".