El cruce entre Manuel del Palacio, Rosalía de Castro y Fernández Ladreda cuenta con un novedoso y muy especial cuadro eléctrico para el control de la iluminación pública. Sus particularidades son varias. En primer lugar, se trata de un monolito "integrado" con la reforma urbana, con un diseño muy alejado de los cuadros tradicionales y producido por la empresa pontevedresa Edigal. La moderna imagen de este aparato, bautizado como serie "Teucro" y que incluso dispone de un mapa de situación de la ciudad y del "Metrominuto", ha propiciado que la empresa gane el premio Larus Arquitecturas 2011 de equipamiento urbano ibérico.

Pero al margen de que se "disimula" entre el resto de equipamientos de la ciudad, la otra gran particularidad de este cuadro eléctrico es que ofrece la posibilidad de disponer de nuevas prestaciones. Aunque el modelo existente carece aún de esos accesorios, es posible habilitarla como "electrolinera" para la recarga de vehículos eléctricos, como estación de control ambiental e incluso como punto wifi.