El envejecimiento de la población y la caída demográfica que caracteriza a Galicia desde hace unos años, ha comenzado a dejarse sentir de forma notable en la comarca de Pontevedra. Aunque la capital se salva, por el momento, de este fenómeno, numerosos municipios del interior experimentan ya un notable aumento de su población mayor de 65 años, hasta el punto de que dos de cada diez vecinos de la comarca superan esa edad, con el agravante de que no hay visos de mejora, ya que para 2014 el crecimiento vegetativo negativo (la diferencia entre nacimientos y defunciones) será el doble que en la actualidad, según el Instituto Galego de Estatística (IGE). Sus datos apuntan que a día de hoy se producen 142 fallecimientos más que nacimientos, pero en apenas tres años el número será de -262 en el área de Pontevedra.

Pese a ello, las previsiones demográficas del IGE mantienen que el censo de la comarca continuará creciendo, ya que los 117.889 habitantes actuales pasarán a 120.071 en 2017, es decir, un 1,8% más. Ese aumento obedece al crecimiento migratorio, pero cada vez es más débil, mientras que en el otro lado de la moneda se sitúa el aumento del número de mayores de 65 años. Así, entre 2002 y 2008, apenas el 17% de los vecinos superaban esa edad, pero en los últimos años se ha disparado ese envejecimiento. Hoy son un 19% y en 2017 rondarán el 21%.

Uno de los datos extraídos de las proyecciones de población del IGE pone en evidencia este fenómeno. Se trata de los indicadores de envejecimiento. El índice de envejecimiento (la relación entre la población mayor de 64 años y la población menos de 20) ha superado este año por vez primera los cien puntos -es decir, hay un número similar de ambas franjas de edad- y para 2015 se calcula que rondará los 106. El índice de sobreenvejecimiento (la relación entre los mayores de 84 años dentro de la población de más de 65) también crece. Actualmente es de 15 puntos.

También es muy significativo el denominado "índice de dependencia global", que mide la relación entre los grupos potencialmente dependientes (los menores de 15 años y los mayores de 64) con respecto al grupo de población activa. Si en la comarca ese índice se sitúa ahora en 47,8 puntos, en apenas cuarto años se elevará al 52,2.

Municipios como Campo Lameiro, Cotobade, A Lama, Cuntis o Ponte Caldelas, entre otros, son los que concentran buena parte de esta envejecimiento, mientras que los concellos más costeros presentan una tendencia más suave. Por el momento, Pontevedra es la más joven de las ciudades gallegas en todos los indicadores demográficos, según confirman los datos del Instituto Galego de Estatística, que de nuevo vuelve a trazar el retrato de un municipio joven (la edad media se sitúa en los cuarenta años) con los menores índices de envejecimiento y con una tasa bruta de natalidad en constante aumento.

La edad media de los pontevedreses se establecía en 2009 es de 41,3 años, exactamente un año menos que su inmediata seguidora, Vigo. Por detrás se sitúan Santiago (42,9), Lugo (43,1), Ourense (44,3), A Coruña (44,4) y Ferrol, que cierra el listado de ciudades con 45,8 años.

La ciudad del Lérez también encabeza los índices relativos a la población menor de 20 años: los niños y adolescentes son el 19,2% del total de los vecinos. En esta variable también es Vigo la segunda mejor situada, si bien en este caso a mayor distancia: los menores de 20 son el 17,5%.

La relación continúa con Lugo (un 17,3% de la población es menor de 20 años), Ourense (16,8%) , Santiago (16,1%), A Coruña (15,1%), y Ferrol (14,9%).