Un reto de organización pero también un escaparate de lujo y un negocio para la ciudad del Lérez, en la que la Vuelta Ciclista a España recalará mañana y que dejará en el municipio (directamente a través de facturas en hoteles, restaurantes, etc. e indirectamente en forma de campaña de imagen) casi un millón de euros, según el estudio realizado por el concello y la firma Unipublic que organiza la competición.
Ese estudio cifra en 950.000 euros el impacto económico global desde el pasado martes y hasta el final de la duodécima etapa. Ésta partirá mañana de Ponteareas para recorrer diversas localidades de la provincia y recalar en Pontevedra por primera vez alrededor de las cuatro de la tarde.
Procedente de O Marco, seguirá por el nudo de O Pino, avenida de Vigo, Fernández Ladreda, general Rubín, Reina Victoria, Alameda, Echegaray y salida por el puente de A Barca.
Hora y media después hará su segunda entrada, esta vez para encarar la recta de meta, situada en la calle Loureiro Crespo. Entrarán por la avenida de Compostela para seguir por la de Buenos Aires y José Malvar para encarar la recta de final de etapa.
Todas estas calles se cerrarán al tráfico (al igual que sucederá con la PO-308 cuando los ciclistas lleguen hasta Poio y Sanxenxo) y se irán reabriendo a medida que pase la comitiva.
Unas 2.000 personas integran la caravana de la Vuelta y desde el pasado martes han formalizado más de 950 pernoctaciones en hoteles del municipio, según los datos hechos públicos por el concello. Los aficionados pudieron ver ayer a varios equipos preparando sus bicicletas y otro material a la puerta de distintos establecimientos, caso del Parador.
El estudio de la organización estima que se abonarán 200.000 euros en facturas de hoteles durante estos tres días.
A mayores, se estima que los técnicos que siguen la vuelta y los aficionados realizarán un gasto que se estima en aproximadamente 50.000 euros.
Peor además está el impacto sobre la marca Pontevedra: se estima que alcanza los 1000.000 euros en el caso de los medios nacionales y 650.000 euros en el de los internacionales.
El alcalde en funciones, Antón Louro, confirmó que está "todo preparado" para la llegada de la caravana, "tanto desde el punto de vista de los ciudadanos como del organizativo" e incidió en que "un acontecimiento deportivo de estas características, con proyección internacional, es una apuesta que merece la pena por dos razones: promociona la ciudad ante los medios y muchos aficionados europeos y por el impacto económico directo".
Antón Louro hizo un llamamiento a la ciudadanía a seguir colaborando con la organización y a participar en el paso y la llegada de la Vuelta Ciclista a Pontevedra.
Tras las primeras señalizaciones y restricciones, hoy se inicia el operativo especial de tráfico. A las 8 horas se prohibirá el estacionamiento en la avenida de Lugo, una restricción que se extenderá a partir de las 15 horas a Loureiro Crespo y Valdecorvos, en donde la organización reserva unas 200 plazas para aparcamiento de vehículos de apoyo.
A partir de las 21 horas se cerrará al tráfico el tramo comprendido entre las rotondas de San Mauro y Juan Carlos I y la calle Ciriñas y una hora más tarde se prohibirá aparcar en tres calles aledañas, en concreto en Rodríguez Seoane, A Estrada y Juan Carlos I.
Los vecinos que viven en estas zonas más próximas a la meta no podrán salir ni entrar hasta que finalice la etapa y se desmonten las instalaciones de la meta, por lo que la Policía Local recomienda a los residentes que si han previsto utilizar el vehículo estacionen fuera de este perímetro de llegada.
El dispositivo se incrementará mañana: a las 7 horas se prohibirá aparcar en José Malvar y se cerrarán al tráfico dos carriles de Juan Carlos I que la organización usará para estacionar vehículos pesados.
Los otros dos carriles de Juan Carlos I se dividirán mediante conos para garantizar los dos sentidos de la circulación.
A las 15 horas se cerrarán Rodríguez Seoane y A Estrada (que servirán como vía de evacuación de los turismos que acompañan a los ciclistas) y dos horas más tarde se boquearán José Malvar y Loureiro Crespo.
Se trata de un dispositivo que afecta a numerosos barrios de la ciudad, caso de Salgueiriños, la plaza Organistro etc, a los que se recomienda también estacionar fuera del perímetro de la meta si necesitan utilizar el vehículo.
Los vehículos procedentes de Monte Porreiro y A Seca tendrán que salir de la ciudad por la avenida de Lugo, que mantendrá operativa una parte de la rotonda de enlace de Loureiro Crespo.
La zona de O Castañal tendrá salida por la urbanización de Valdecorvos pero los residentes no podrán acceder a los garajes hasta la conclusión de la prueba.
