La proliferación de terrazas y veladores de bares y cafeterías en la ciudad, muchas de ellas incluso con estufas y mantas para proteger del frío a sus clientes, se ha disparado desde principios de año, cuando entró en vigor la ley antitabaco que prohibe fumar en el interior de los locales pero sí lo permite en estas terrazas. Con la llegada del buen tiempo y la proximidad del verano, el Concello se prepara para una nueva oleada de solicitudes, que ya se ha puesto de manifiesto en estos primeros cuatro meses del año.

Desde enero hasta finales de abril, el ayuntamiento ha recibido y tramitado un total de 27 peticiones para nuevas terrazas de bares y cafeterías, según datos oficiales de las propias oficinas municipales. Se trata de locales que nunca habían dispuesto con anterioridad de instalaciones de este tipo pero que este año apuestan por ellas para contrarrestar la ley antitabaco. No forman parte, por tanto, de esta relación, aquellos bares y cafeterías con terrazas ya consolidadas o autorizadas en años anteriores.

Los 27 permisos tramitados este año suponen una media de casi siete autorizaciones al mes, más de doble del ritmo que se registró el pasado año. En sus doce meses se contabilizaron 35 licencias (tres cada treinta días), si bien en 2010 se produjo la circunstancia de que este índice de autorizaciones se debió a una inspección de terrazas y veladores puesta en marcha por el concello. De hecho, de esos 35 permisos, únicamente tres respondían a peticiones directas de los empresarios, ya que los 32 casos restantes corresponden, según las mismas fuentes, a bares que instalaron sus terrazas sin autorización alguna y que se vieron obligados a regularizar su situación tras la visita de los inspectores municipales.

Causas

De hecho, esta campaña sigue en vigor y en el Concello se atribuye parte del elevado ritmo de este año a esa vigilancia. No obstante, se reconoce también que la avalancha obedece en gran medida a las limitaciones de la ley antitabaco que se modificó en enero pasado. Hasta entonces raro era el bar que se decantaba voluntariamente por prohibir fumar en su interior, pero desde hace cuatro meses ese veto es obligado y los veladores en la calle se han convertido en el único refugio para tomar un café y consumir un pitillo a la vez.

Las terrazas pretenden paliar las pérdidas que esta prohibición ha supuesto en las arcas de los bares. Hace unos días, Salvador Santiago Rodríguez, presidente del recién creado colectivo de Hosteleiros Asociados de Pontevedra (Hoaspo), admitía que "en Galicia hemos bajado en el nivel de ingresos, una media del 25%", si bien aclaraba que no toda esa pérdida se podía atribuir a la ley antitabaco, ya que "en estos meses se ha agudizado la crisis y hay que valorar qué porcentaje es consecuencia de la prohibición de fumar y cual de la crisis".

Control

Eso sí, admite esta asociación que el fenómeno de la terraza está muy marcado en estos meses por esta nueva prohibición. Aunque a juicio de Salvador Santiago "la incidencia es desigual", el sector "más perjudicado es el de las cafeterías. Se nota sobre todo en el café de media mañana y en el media tarde y se resienten de manera especial los establecimientos que no tienen terraza", una carencia cada vez menos frecuente ante el ritmo de solicitudes, que amenazan con convertir las calles, especialmente en una ciudad con tantos espacios peatonales como Pontevedra, en una sucesión de veladores que limitan el paseo. Al respecto Hoaspo señala que "las terrazas tienen que estar controladas, eso no tiene discusión. Son bonitas porque dinamizan el lugar y atractivas para el turismo pero no pueden obstaculizar el paso a las personas, a los carros de niños, a las sillas de ruedas". Recuerda Santiago Rodríguez que "la instalación de terrazas está controlada por el ayuntamiento y yo creo que tras las elecciones, vamos a tener reuniones con los responsables municipales para que, si por nuestra parte hay algún abuso, tratar de corregirlo pero también para que, cuando sea posible, aumentar la permisividad para instalar terrazas en sitios que ahora no hay. Quizás haya que modificar el actual reglamento".