La corporación municipal despidió ayer el mandato reprobando al líder de la oposición, Telmo Martín, por su "estilo barriobajero" de hacer política, como apuntó el edil nacionalista César Mosquera. BNG y PSOE aprobaron una reprobación formal del portavoz municipal del PP, por sus "insidias y calumnias" sobre "personas, entidades y empresas", hechas "sin razón, base o indicio alguno para tales agresiones", como se recoge en la moción aprobada con los votos del bipartito y la abstención del Partido Popular. Los concejales del PP no votaron porque –según explicaría su portavoz en otro punto de la sesión plenaria– se puede reprobar a un miembro del gobierno, pero no de la oposición.

Tras las intervenciones de nacionalistas y socialistas, que emplearon casi media hora en explicar porqué han decidido reprobar al edil conservador en el que puede ser el último pleno del mandato (las elecciones se celebrarán el próximo 22 de mayo), Telmo Martín despachó la cuestión en menos de treinta segundos, en los que se limitó a "agradecer la importancia que nos dan" y a argumentar que prefiere ganar la confianza "de todos los pontevedreses". Le dio tiempo también a criticar al bipartito por actuar "más como oposición que como gobierno" y por su "falta de liderazgo".

"Acto de desagravio"

Fue toda la respuesta que ofreció el líder conservador a lo que BNG y PSOE entendieron como "un acto de desagravio de la corporación a todos los que sufrieron este tipo de agresiones injustificadas" por parte de Telmo Martín. César Mosquera aportó algunos ejemplos de dichos "insultos, insidias y calumnias" hacia "personas y entidades". Así, recordó la "especulación" atribuida a la ONCE por el convenio urbanístico del colegio Santiago Apóstol, tantas veces denunciado por Martín para, finalmente, votar a favor de dicho convenio; o llevar el coste del estacionamiento de la Plaza de España al juzgado contencioso administrativo, sin consecuencia legal alguna; reclamar en los juzgados las nóminas de los funcionarios, también rechazado por la justicia; o pedir la dimisión del edil Raimundo González por las obras de la plaza de Barcelos "correctamente adjudicadas", recordó Mosquera.

Teresa Casal, por su parte, recordó que Telmo Martín la llevó ante la justicia, en una demanda también sin consecuencias.