Antonio Dias Lema, uno de los personajes más apreciados de la historia reciente de la ciudad por su intensa vida profesional, social y cultural, falleció ayer en su casa de Pontevedra a los 84 años y esta tarde el considerado cronista popular de la ciudad será despedido en un funeral que se celebrará a partir de las 17 horas en la iglesia de Virgen del Camino.
Hasta el tanatorio de San Mauro, en donde se velan sus restos, se acercaron desde ayer numerosos pontevedreses para transmitir su pésame a la viuda, María Teresa Silva, y a sus hijos.
Entre ellos, el alcalde, Miguel Fernández Lores, que como José Fernando Filgueira (reciente Medalla de la provincia y ex compañero de Dias Lema en el Hospital Provincial) recuerda especialmente que "sobre todo fue un médico, además de figurar en la creación de clubes deportivos como el Teucro, el Cisne o el Pontevedra C. F. o de ser concejal de Deportes durante la etapa de Filgueira Valverde en la Alcaldía".
El presidente de la Diputación Provincial, el gerente del Complejo Hospitalario de Pontevedra, la vicepresidenta provincial Teresa Pedrosa o los directivos del Pontevedra C.F. también se sumaron ayer a las condolencias a la familia por la desaparición de un hombre "ante todo buena persona, entrañable y familiar".
Nacido en 1926, Dias Lema vivió momentos clave de la historia de la ciudad, como la Guerra Civil, que recordaba de su adolescencia. Su padre, apodado "El Portugués" (un sobrenombre que heredaría cariñosamente su hijo) era propietario de un taller de bicicletas en la calle García Camba y sacaba adelante a una numerosa prole.
En esa misma calle (copada entonces por familias procedentes de otras ciudades "que incorporaron muy bien las claves de esta ciudad", como recuerda José Fernando Filgueira) también vivía la familia de Celestino Poza, con el que el joven Dias Lema se formaría años después como cirujano.
Ejerció durante 40 años en el Hospital Provincial, era médico del Instituto Social de la Marina y fue 13 años director de la Escuela de Enfermería.
Tras su jubilación en 1991, se dedica a la historia e investiga el Hospital Provincial. Fruto de esos estudios fueron su tesis doctoral y la obra "Historia del Hospital de Pontevedra 1890-1955", editado por la Diputación Provincial con motivo del 50 aniversario de la promoción de la que formó parte Dias Lema.
La muerte lo sorprendió precisamente cuando trabajaba en la segunda parte de esta obra sobre el hospital, tal y como recordaba ayer el escritor José Benito García Iglesias. Éste es uno de los representantes de la cultura que alude especialmente a la erudición "la generosidad y el carácter desprendido de una persona siempre dispuesta a ayudar a los jóvenes investigadores y reacia a recibir reconocimientos, fue todo un referente de la divulgación de la historia de Pontevedra".
Dias Lema fue también un deportista brillante. Aprendió a ser ciclista "con la misma bici con la que aprendimos a montar buena parte de los niños pontevedreses de la época", gustaba de recordar. En los años siguientes contribuyó decisivamente a la fundación del Club Ciclista de Pontevedra o el Vespa Club.
También fue médico del Pontevedra C.F. (vivió como directivo los éxitos del "Hai que roelo") y participó en la dirección y/ o fundación de otros clubes como la Sociedad Gimnástica, el Teucro y el Cisne, pero fue su "prodigiosa memoria", como destaca José Fernando Filgueira, la que le permitió convertirse en el cronista popular de la ciudad, glosando sus tradiciones, fiestas, efemérides y desencuentros.
Al presentar el último libro de José Benito García, Dias Lema recordó que "no soy el cronista oficial de Pontevedra, sólo el popular, que para mi es un honor". Hoy Pontevedra despide a un hombre que cuando le preguntaron el por qué de su intensa labor social sólo pudo responder: "Porque vivo cautivado por mi ciudad, me encanta".
