El alcalde de Pontevedra, Miguel Fernández Lores, señaló ayer que la decisión de Ence de recurrir a los juzgados para sacar adelante su proyecto de planta de biomasa en el complejo industrial "demuestra una vez más que la empresa nunca tuvo intención de marcharse de Lourizán" y acusó una vez más a la Xunta (pese a que es la destinataria del recurso judicial) de "favorecer descaradamente a la compañía". En este caso, Lores citó el caso del canon del agua.

Según sus explicaciones, "todas las empresas que contaminan pagan ese canon y pronto se aplicará esa tasa a todos los ciudadanos, pero se exime de su pago históricamente a Ence y no se hace nada para que colabore en el saneamiento de la ría". Insiste en que la empresa pastera "duplica el consumo de agua de toda Pontevedra, con más de 15 millones de metros cúbicos y le tocaría pagar 4,5 millones de euros, pero de eso no habla la Xunta".

Por eso, el alcalde señaló ayer que "el PP no se toma este asunto en serio ni manda mensajes firmes y un ejemplo es que la Xunta ordena que el PXOM incluye el carácter industrial de los terrenos que ocupa Ence y no anule el decreto de supramunicipalidad. La Xunta -añade- no da pasos firmes y por escrito para que Ence tenga claro que no va a seguir en Lourizán".

Además de reprochar esta actitud al gobierno gallego, Fernández Lores acusa a la compañía de "poner en marcha una campaña agresiva de propaganda para intentar convencer a la opinión pública de la bondad de su instalación en Lourizán, de lo estupendo que es la planta de biomasa para el medio ambiente, pero cualquier persona se da cuenta de que eso es mentira. Ya va siendo hora de que se debe de obtener rentabilidad a cuenta de la salud de los pontevedreses, del uso de un espacio público de 600.000 metros cuadrados, porque la única bondad es para los accionistas de Ence, que obtienen grandes beneficios del uso de esos terrenos prácticamente gratis y sin pagar lo que pagan otras empresas por consumo de agua y contaminación de la ría".