La Asociación del Pueblo Gitano de Galicia se siente discriminada y desamparada por las administraciones públicas y, especialmente, por la Xunta porque consideran que no existe la suficiente preocupación por estos colectivos.

El motivo de la protesta es que observan que con el paso del tiempo cada vez más vecinos que no eran pobres pasan a formar parte de un colectivo marcado dentro de la franja de la pobreza. Como dice la asociación, "antes malvivían, pero ahora son pobres y el número de personas que se encuentran en esta situación van en aumento". Consideran que las administraciones públicas "pasan olímpicamente y no hacen caso de lo que denunciamos".

La asociación cree que ha habido una reducción considerable de las inversiones en el gasto social y aprecian que las ayudas que antes recibían de todo tipo con el anterior gobierno se han visto reducidas o suspendidas con la Xunta que actualmente gobierna.

Denuncian que la política social real y efectiva no interesa a las actuales administraciones públicas y muy especialmente a la Xunta de Galicia, sin embargo, según la asociación, se hacen grandes campañas de marketing anunciando que se ayuda mucho a los colectivos desfavorecidos cuando esto no es cierto. Para ellos, muchas asociaciones que trabajan desde hace muchos años con los colectivos de riesgo de exclusión social ven peligrar su futuro por falta de apoyos.