Unos sesenta peregrinos portugueses que regresaban en autobús de Santiago por la Autopista del Atlántico no olvidarán la jornada del Apóstol de ayer, ya que se pasaron toda la tarde "tirados" en la estación de peaje de Vilaboa al averiarse el vehículo. El motor del autocar en el que viajaban desde Compostela y acudían a realizar una visita a Baiona, comenzó a arder poco antes de las cinco de la tarde, a la altura de esa estación, por lo que los excursionistas, que no sufrieron daño alguno, fueron evacuados del vehículo y alojados temporalmente en las inmediaciones, mientras un segundo autobús era enviado desde Oporto para recogerlos.

Sin embargo, este segundo vehículo también se averió antes de llegar a recoger a los peregrinos, por lo que fue necesario solicitar los servicios de un tercer autocar, contratado esta vez más cerca de la frontera, en la zona de Viana do Castelo.

De este modo, una jornada que empezó con la alegría de asistir en Santiago al día grande del Apóstol, se truncó a las cinco de la tarde y acabó por romperse por completo poco después, hasta el punto de que los excursionistas, entre ellos algunos niños y muchos pertrechados con sus mochilas y bastones del caminante, pasaron más de cuatro calurosas horas apostados en un margen de la AP-9.

Los excursionistas fueron acomodados en una zona de mantenimiento de la autopista, buscando algo de sombra, mientras la agrupación de Protección Civil de Vilaboa se encargó de atenderlos en lo posible durante toda la tarde. Estos efectivos entregaron agua y hielo a los peregrinos portugueses, procedentes de la zona de Oporto, con el fin de mitigar el intenso calor. Cuando se supo que el segundo autobús que acudía desde la ciudad a orillas del Duero también estaba estropeado, optaron por prepararse la merienda a pie de autopista. Para ello fue necesario acudir al primer autocar, que permaneció toda la tarde averiado en el peaje, a recoger la comida con la que pretendían disfrutar de un encuentro en Baiona. Finalmente, el "ágape" se celebró en Vilaboa hasta pasadas las 21.00 horas. Los excursionistas quedaron "muito agradecidos" de las atenciones de Protección Civil del municipio.