Xosé Manuel Buxán es profesor en la Facultad de Bellas Artes de Pontevedra y homosexual. También es autor de uno de los cinco artículos del libro “La homosexualidad a debate” en el que aporta su opinión al respecto. Con motivo de la celebración del Orgullo Gay en Pontevedra dará una conferencia sobre el arte y la homosexualidad hoy a las 20 horas en el Teatro Principal.

—¿Son Pontevedra o Vigo ciudades homófobas?

—Yo no creo que sea una ciudad homófoba para nada, hoy tiene un gobierno progresista y el mismo hecho de que se haga esto hace que me parezca que no lo es. Lo que sí pasa es que tiene las características de todas las ciudades pequeñas del mundo: el hecho de que para la comunidad gay y lésbica suelen ser siempre más dificultosas en su visualización. Es más fácil que el gay se marche a Vigo para salir de noche o para irse a una sauna. Vigo y Pontevedra son como un ente muy interconectado, hay mucha gente gay y lésbica que hace vida en Pontevedra con normalidad pero los espacios de ocio los tiene en Vigo. Una ciudad que organiza esto es una ciudad que tiene unos visos progresistas y modernos. Ahora tiene más eventos del orgullo gay Pontevedra que Vigo.

—¿Por qué el acrónimo LGTB?

—Antes siempre eran gays y lesbianas y ahora en los últimos años todos los colectivos tienen un montón de acrónimos LGTB, se tiene mucho cuidado en que estén presentes también los transexuales, las lesbianas y por supuesto los bisexuales. Esto fue cambiando mucho, antes era el movimiento gay, después fue gay lésbico y ahora es siempre el movimiento LGTB. Y de hecho, el Orgullo de Madrid este año era por la transexualidad. Entonces, esto agrupa a toda la comunidad gay lésbica en general.

—¿Están los transexuales y bisexuales menos aceptados socialmente?

—Yo creo que los bisexuales están muy aceptados porque hay mucha gente que le resulta más cómodo decir que es bisexual que es gay en el sentido de que manifiesta que no tiene la preferencia clara por ninguno de los dos. Socialmente queda mucho por luchar, por eso la transexualidad era el lema del Orgullo de Madrid de este año. El reconocimiento de que hay hombres que quieren ser mujeres y mujeres que quieren ser hombres.

—¿Cómo ve a estos colectivos en Galicia?

—En general, no sólo en Galicia, los colectivos están bastante diseminados y son muy reducidos en cuanto a número de miembros. En Galicia hay una serie de colectivos y cada uno de ellos a veces con ideas contrarias a los otros, unos reivindicando el Orgullo y otros actuando con otro tipo de políticas.