La modificación de la ordenanza municipal por la que se extenderá a toda la ciudad la limitación de velocidad de circulación a los 30 kilómetros por hora estará aprobada en agosto si no recibe alegación alguna durante la fase de exposición al público iniciada ayer. Este trámite indica que todos los interesados podrán consultar la documentación durante el plazo de un mes. "De no presentarse reclamaciones o sugerencias en ese plazo, la ordenanza se considera definitivamente aprobada y entrará en vigor tras la publicación de sus texto íntegro en el Boletín Oficial de la Provincia y una vez transcurrido el plazo establecido".

Una vez que se produzca esa entrada en vigor, ningún coche podrá transitar por las calles de Pontevedra a más de 30 kilómetros por hora. El gobierno local decidió extender al 100% del casco urbano, incluidos los accesos a la ciudad y los viales de mayor capacidad, una limitación de velocidad que ya se aplicaba en el centro, pero que se generalizará de forma total en una "iniciativa pionera en Galicia y en España", según destaca el gobierno local.

Además, se recuerda que detrás de este cambio hay "años de reformas urbanas, medidas para calmar el tráfico, instalación de pasos de peatones sobreelevados" y otras actuaciones en gran parte del casco urbano " cuyo objetivo es garantizar la seguridad vial, evitar los accidentes, pero también reducir los ruidos y la contaminación".

También se ha querido señalar desde el Concello que esta limitación no se debe confundir con la "Zona 30", que son aquellos puntos donde, además de limitación de velocidad, es el peatón el que tiene preferencia.

Con la medida ahora en marcha e mantendrá el mismo modelo circulatorio, con pasos peatonales, aceras y prioridad para el tráfico rodado, pero con la obligación de levantar el pie del acelerador.

Aunque alrededor del 80% de las calles están adaptabas ya a esta medida, todavía restan obras y reformas pendientes, aunque en su mayor parte adjudicadas. Así, está previsto aplicar los pasos sobreelevados (los populares "lombos") en calles como Eduardo Blanco Amor y el tramo de la avenida de Lugo hasta la rotonda de Montecelo, así como en algunos viales del barrio de Monte Porreiro.