La Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras aún tiene esperanzas de que el Ministerio de Fomento modifique el tramo final de la variante de Marín, en el sentido propuesto por la Xunta (alejarlo unos metros del actual nudo de Celulosas). Pero si en el plazo de un mes el ministerio no responde a la propuesta de la Xunta, la consellería retomará el proyecto tal y como está previsto, “a sabendas de que é un erro”, declaró el titular de Infraestructuras, Agustín Hernández, en una visita a las obras del puente que comunicará Lérez con Monte Porreiro y que ejecuta la Diputación.
El conselleiro explicó que el Gobierno gallego tiene claro que terminar la obra de la variante “é imprescindible” y que no se puede asumir más retraso. Agustín Hernández aún alberga esperanzas de que el ministerio modifique su postura en el sentido propuesto por la Xunta pero, si esto no fuera posible, “desbloquearemos a obra e a executaremos tal e como está adxudicada”, anunció.
Acuerdo
Con todo, Hernández recordó que según el acuerdo suscrito entre el anterior Gobierno de la Xunta y el Ministerio de Fomento, éste tendría que hacer una aportación presupuestaria para hacer frente a la modificación del nudo de Celulosas. Así, si la Xunta ejecuta finalmente el proyecto en estas condiciones, la consellería exigirá al ministerio que cumpla este compromiso y asuma económicamente la reforma del nudo. Por el contrario, en caso de que Fomento acepte la propuesta de la Xunta de evitar el actual enlace, para ejecutarlo hacia el interior de la autovía de conexión con la AP-9, el ministerio se ahorraría esa aportación presupuestaria.
El conselleiro solicitará en los próximos días una entrevista con el secretario de Estado de Infraestructuras, para hacer un último intento de que el ministerio aleje el nudo de la fachada marítima. De todo modos, Agustín Hernández ya adelantó que en caso de no ser posible, se reanudará la obra como está trazada.
La variante de Marín es una obra que ejecuta la Xunta, ya con considerable retraso, pero el nudo final debía ser financiado a partes iguales con el Estado, que no acepta el cambio propuesto por la administración autonómica, al parecer por interferir con las normas de accesos de las autopistas.
Puente sobre el Lérez
Estas explicaciones se ofrecieron en una visita del conselleiro, el alcalde de Pontevedra y el presidente de la Diputación, a las obras de ejecución del puente que unirá Monte Porreiro con la parroquia de Lérez. Se trata de una obra que acometen las administraciones local y provincial, pero el titular de Medio Ambiente realizó toda su tramitación previa siendo director de Infraestructuras de la Diputación de Pontevedra. El presidente provincial, Rafael Louzán, indicó que este viaducto asumirá un tráfico de más de 5.000 vehículos al día y que estará realizado en el plazo de un año.
El presupuesto de ejecución es de 5,6 millones de euros y está vinculado a un nuevo vial de acceso Oeste a Montecelo, a pesar de que este hospital ya no recibirá la ampliación prevista cuando se planificó el nuevo acceso.
El nuevo viario incluye dos glorietas de 14 metros de radio, arranca en la PO-223 (Porta do Sol, en Lérez) y conecta con la avenida de Buenos Aires, salvando el río Lérez con este puente de 170 metros de longitud.
A la visita a las obras acudió también una representación de los vecinos de Monte Porreiro, a través de la asociación “O Mirador”, que trasladó al conselleiro su preocupación por el enlace de este viario con el puente y la solución a los tráficos que generará en el barrio.
Por su parte, el alcalde Miguel Lores destacó la importancia de este nuevo puente para mejorar la movilidad perimetral de la ciudad y pidió al conselleiro Hernández que “a de hoxe sexa a primeira de outras moitas visitas, a obras que tamén son moi necesarias e que, neste momento, están pendentes, como son a variante de Marín, a estrada a Ponte Caldelas, ou a ronda urbana, entre outras”, recordó Lores. El alcalde se mostró satisfecho de comprobar el “buen ritmo” que mantienen estas obras y reconoció la “sensibilidad” mostrada por los responsables de la Diputación Provincial, al firmar el convenio con el Concello de Pontevedra para construir este puente a cambio de la cesión del edificio de la antigua delegación de la Consellería de Educación en Pontevedra, que “resolverá problemas e dará mellor calidade de vida aos veciños da comarca”, dijo el alcalde.
