El conflicto entre el gobierno local y la Consellería de Educación por las obras que necesita el colegio Froebel para resolver sus problemas de filtraciones de agua sigue abierto. El concejal del área, Julio Castela, emplazó ayer a la Xunta a asumir en su totalidad la renovación integral del tejado del centro "ya que se trata de una obra que cuesta entre 250.000 y 300.000 euros que afecta a la estructura del edificio, competencia exclusiva de la consellería".
El concejal recuerda que hace varias semanas, cuando surgió este asunto, la Xunta y el concello plantearon la posibilidad de firmar un convenio que incluyera estas obras y otras actuaciones en los centros públicos, con un reparto de los fondos del 60% de las arcas autonómicas y un 40% municipal, "pero no hubo respuesta hasta ahora ni se ha tramitado borrador alguno", lamentó Castela, que reprocha a Educación que "habla mucho pero hace poco".
Vidal Portela
El edil anunció que en breve remitirá a la consellería un informe sobre las obras necesarias en el Froebel. Reiteró que ese informe detalla una inversión "entre 250.000 y 300.000 euros porque es necesaria la sustitución total de la cubierta". Asimismo, también demanda a la Xunta que apuesta por mejorar el colegio Manuel Vidal Portela, un edificio que se encuentra en parte en terrenos de Costas, y sobre el que no está claro su futuro. Por esa razón, la Xunta decidió aplazar cualquier inversión hasta que se concrete si permanecerá abierto. "El concello sí ha optado por realizar obras en este colegio (en concreto el arreglo de los aseos) y pedimos a la consellería que también las haga", dijo Castela.
El concejal presentó ayer una nueva batería de actuaciones en los centros públicos, que suman unos 375.000 euros procedentes del segundo Plan E, por lo que deben estar ejecutadas antes del 1 de enero de 2011. Cinco son los colegios incluidos en esta iniciativa. En el CEIP Xunqueira II, con más de 30 años de antigüedad se sustituirán aseos del primer piso, que presentan notables deficiencias. En el Manuel Vidal Portela, de los años sesenta, se arreglarán también los aseos, salvo los de Educación Infantil, renovados hace dos años. En Vilaverde (Mourente) serán cambiadas las ventanas del edificio principal mientras que en los dos colegios de Salcedo (Cabanas y San Martiño) se instalarán marquesinas para proteger a los alumnos mientras aguardan al autobús.
