Las obras de reforma de la avenida de Santa María, cuya ejecución general se dio por completada el pasado 30 de diciembre, todavía proseguirán al menos un mes más para llevar a cabo determinados “ajustes”, según admitieron ayer fuentes municipales, que sitúan la inauguración oficial de este espacio para “finales de febrero”. El aspecto que presenta la avenida, con una gran superficie pavimentada y algunos otros defectos que denuncia algún colectivo vecinal, será mejorada con un “plan de ajardinamiento” en el que aún trabaja la empresa adjudicataria. Además de completar las pequeñas áreas con césped, está previsto instalar jardineras y otros detalles.

Pero no sólo se realizarán trabajos pendientes, sino que será necesario mejorar actuaciones ya realizadas y que no quedaron del gusto del gobierno local, según añaden las mismas fuentes. En concreto, habrá que cambiar el banco corrido, de madera, instalado a lo largo de un lateral de la nueva plaza. Se ha comprobado que es incómodo y que el asiento está mal situado. Y además, se reajustará la instalación de la fuente de fundición que preside el nuevo entorno. Está previsto dotar a este elemento de un pedestal, como el de la plaza de Curros Enríquez, y colocar algunas piezas que faltan en su cúspide.

Desde el concello se aclara que la visita que el 30 de diciembre realizó a las obras la concejala del casco viejo, Teresa Casal, tenían el objeto de “dar cumplimiento” a la promesa de que ese día quedaría despejada y pavimentada toda la avenida, pero se admitía ya entonces que “faltan algunos ajustes” cuya ejecución se prolongará hasta finales de febrero. Para entonces está previsto realizar una inauguración formal, en la que se ofrecerá una exposición en plena calle con fotografías y paneles de la propia obra y de la historia que rodea ese ámbito.

Torres Arzobispales

Al respecto, el apartado más destacado es el futuro Centro de Interpretación de las Torres Arzobispales (CITA), un pequeño museo subterráneo que se ejecuta con fondos del primer Plan E del Estado (la reforma en superficie forma parte de un convenio entre la Xunta y la antigua Consellería de Vivenda) y que debería estar disponible entre abril y mayo próximo. Este recinto recupera los cimientos y muros del medieval palacio arzobispal que se levantaba en donde ahora se ubica la sede del Patronato de Turismo Rías Baixas, y se “esconde” bajo el pavimento de la avenida. Al margen del acondicionamiento interior, se trabaja ahora en la zona de acceso, por la calle Mestre Mateo.

Por su parte, no se dispone de una fecha concreta para completar la remodelación del Campillo de Santa María. Se trabaja en la pavimentación de los soportales, pero falta toda la actuación en la “ladera” hacia Arzobispo Malvar y la recuperación de sus restos arqueológicos.