La iglesia del Monasterio de San Benito de Lérez se quedó pequeña para albergar a todos aquellos pontevedreses que ayer quisieron rendir un último homenaje a un hombre justo y solidario, Gonzalo Jar Couselo.

Natural de esta misma parroquia de Lérez, el general de la Guardia Civil fallecía el pasado viernes 25 de diciembre en Madrid a los 60 años de edad. Un periplo vital que ayer repasaban muchos de los asistentes al funeral por su fallecimiento y en el que destacaban su compromiso con la solidaridad, los valores democráticos y los derechos humanos. También destacaban su labor como defensor de la presencia del gallego en las Fuerzas Armadas o su faceta como divulgador del derecho internacional.

Hasta su fallecimiento fue secretario general de la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos de la Seguridad del Estado, cargo desde el que impulsó grandes infraestructuras para las Fuerzas de Seguridad en Pontevedra. Los asistentes también destacaban su contribución en el campo de la justicia internacional, ya que desarrolló programas en varios países africanos. Entre el legado que deja Jar Couselo también se encuentran diversos estudios sobre la Guardia Civil, ejércitos, conflictos armados y situaciones de emergencias humanitarias. Entre sus preocupaciones se encontraba, por ejemplo, la protección a las víctimas en zonas de guerra. El general era, además, doctor en Ciencias Políticas y Sociología y miembro del Centro de Estudios de Derecho Internacional Humanitario de Cruz Roja Española, organización de la que era voluntario.

Presencia de autoridades

El funeral comenzó a la una de la tarde y al mismo asistieron numerosas autoridades vinculadas a la Defensa, la Guardia Civil y las instituciones del Estado. Entre ellas cabe destacar, por ejemplo, la del delegado del Gobierno, Antón Louro; o la del subdelegado, Delfín Fernández Álvarez; el fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido; o el fiscal de la Audiencia Provincial de Pontevedra, Benito Montero. En el funeral también hubo una importante representación del cuerpo al que él pertenecía, la Guardia Civil, entre ellos su hermano, también comandante del Instituto Armado.

Todos los presentes se destacaron la trayectoria profesional y humana de Jar Couselo quien además, siempre se sintió orgulloso se de ser de Lérez.