El Colegio de Odontólogos inició ayer una campaña para prevenir el cáncer oral: todos los interesados en realizarse una revisión gratuita sólo tendrán que ponerse en contacto con los organizadores en el teléfono 986 864449 (o contactar a través de las web www.canceroral.es) para que se le indique la clínica más cercana a la que puede dirigirse. El objetivo es explicar a los pacientes cómo realizar una autoexploración y concienciarlos de la importancia de prestar atención a las pequeñas úlceras o lesiones que pudiesen aparecer en la boca.

—¿Tenemos los gallegos una buena salud bucodental?

—Si la tenemos, es cierto que todo es mejorable, bastante mejorable, pero lo cierto es que los profesionales constatamos que la mejoría está siendo notoria. Nuestra salud dental se ha incrementado muchísimo en las últimas décadas, sobre todo en los sectores más jóvenes, los planes de salud bucodental infantil han cambiado completamente el panorama sanitario para la gente más joven y por lo que respecta a los adultos en general cada vez tenemos más conciencia.

—¿Cuáles son las patologías más frecuentes en las clínicas dentales?

—Las más frecuentes son siempre las caries y la gingivitis. El cáncer oral, que es el objetivo de nuestra nueva campaña, no es afortunadamente tan frecuente ni mucho menos, pero hay que insistir siempre en lo importante que es la prevención: es muy agresivo y se podría hacer mucho, muchísimo, simplemente con adelantar el diagnóstico, porque tal y como están llegando hoy los pacientes a los cirujanos, con lesiones superiores a dos centímetros y en general en estadios avanzados el porcentaje de supervivencia a los cinco años es muy bajo, raramente supera el 30%. En cambio, si esa enfermedad se detecta cuando las lesiones son menores de esos dos centímetros y en estadíos iniciales la probabilidad de supervivencia es muy alta, hablamos de un buen pronóstico con una capacidad de supervivencia por encima del 85%, entonces hay que ver que según el momento en que se detecte hay una distancia enorme entre las posibilidades de sobrevivir de uno y otro paciente y es ahí donde hay que insistir.

—Recuerda que otra de las características del cáncer oral es que, a diferencia de otros tumores, estos se ven o se tocan

—No es necesario hacer pruebas complementarias muy sofisticadas, una lesión de ese tipo en la boca efectivamente o se toca o se ve.

—Es un cáncer muy visible pero que se detecta muy tarde ¿qué explicación dan los profesionales a este hecho?

—Si sucede eso, es curioso y lo que vemos los dentistas es que simplemente los pacientes lo han dejado pasar, más aún, vemos que ese tipo de comportamiento sucede no sólo en sectores marginales sino que en ocasiones personas con niveles socioeconómicos y culturales bastantes desarrollados nos llegan a la consulta con lesiones que son casi inexplicables, por eso nunca se insiste lo suficiente en la importancia de este tipo de campañas como la que iniciamos ahora y de realizar visitas periódicas al especialista en salud bucodental, sin alarmarse pero tampoco sin abandonarse.

—¿Cómo se realiza una buena autoexploración bucal?

—Este año queremos incidir mucho precisamente en la importancia de una buena autoexploración, porque es natural que si hay una lesión el paciente sea el primero que la detecta, antes de que acuda al especialista para que éste descarte si es maligna o simplemente una rozadura, que afortunadamente suele ser el caso más frecuente, pero en todo caso es importante consultarlo con el dentista, que es el que mejor puede advertir las características de la lesión y derivar el paciente llegado el caso a otros servicios. En casa lo que podemos hacer es buscar la existencia de lesiones rojas y/o blancas que pueden o no tener úlceras e incluso pueden no doler; debemos estar atentos a esas lesiones y en caso de que no desaparezcan en dos semanas se debe acudir al dentista. Para esa autoexploración basta un espejo, una fuente de luz y el mango de una cucharilla parra ayudarnos a acceder visualmente a todos los puntos de la boca.

—¿Cualquier lesión en la boca debe hacernos sospechar o ha tener unas características?

—Un cáncer de boca se puede presentar de varias formas: un cambio de color, dificultad para mover la lengua, un bulto o un sangrado inexplicable que normalmente suele ser gingivitis pero que podría no serlo o problemas de movilidad en general, pero todas esas representan apenas entre un 10 o un 15% del total de casos, la lesión más típica del cáncer de boca es una úlcera que tiene los bordes elevados, el fondo sucio y es de consistencia dura como el cartílago; normalmente se localiza en el tercio medio y posterior de la lengua, también en el fondo de la boca, eso representa más del 80% de este tipo de cáncer, por eso lo importante en la autoexploración es tirar de la punta de la lengua hacia un lado, ver en esa zona si hay lesiones, ver el otro borde y compararlos y si hay una lesión que no pasa en diez días o dos semanas, repito, acudir al dentista para hacer una biopsia o lo que él indique.

—Otro buen consejo es dejar el tabaco y al menos moderar el consumo de alcohol...

—Si naturalmente, aquí los dos desencadenantes más importantes son por este orden el tabaco y el alcohol y lo que es peor de todo es la combinación de ambas, porque el alcohol permeabiliza las membranas de las células y hace que todos los factores cancerígenos del tabaco se introduzcan en la célula y produzcan mutaciones. Esa combinación es peligrosísima, como también lo es dejar la boca con raíces o con ganchos, prótesis mal ajustadas que hacen heridas cuando una prótesis jamás debe hacer heridas ya que eso que en principio es benigno si se deja pasar puede derivar en una enfermedad maligna.

—¿Es la odontología estética otra de las áreas que más ha avanzado en su especialidad?

—Efectivamente y eso sucede porque en todo el campo de la estética la odontología tiene muchísimo que aportar, la sonrisa sigue siendo un elemento central en la estética, una bonita sonrisa hace tanto o más por la estética que una cirugía plástica. De todos modos conviene no exagerar, no tener comportamientos obsesivos porque muchas veces podemos entrar en una agresión al diente, desbordando el propósito inicial que tiene que ser una sonrisa bonita pero, sobre todo y por encima de todo, una sonrisa sana. Por ejemplo en la ortodoncia, hay grandes avances como brackets ocultos, otros de porcelana, también dentro de la estética están las carillas de porcelana para disimular ticciones y también los blanqueamientos, con los que hay que tener cuidado porque afectan a las encías y al cuello de los dientes y puede afectarse a su consistencia o provocar sensibilidades, por lo que son procedimientos que deben estar muy controlados.