No sólo es el cáncer más frecuente entre la población femenina sino que su incidencia aumenta cada año (se estima que en un 2%) fundamentalmente por cuestiones relacionadas con factores ambientales, la dieta y los malos hábitos a la cabeza. Es una enfermedad desgraciadamente habitual y peligrosa, pero no una condena y de hecho la gran mayoría de las pacientes diagnosticadas se cura.

Se trata del principal mensaje que transmitieron ayer la vicepresidenta de la Diputación Provincial, Teresa Pedrosa, y las responsables de la Asociación contra el Cáncer en la presentación de las Jornadas Informativas sobre Cáncer de Mama.

Éstas se desarrollarán el próximo día 19, coincidiendo con el Día Mundial contra el Cáncer de Mama, y están pensadas inicialmente para los trabajadores de la Diputación, si bien la organización invita a todos los interesados a sumarse al programa. Incluirá una charla coloquio en la que intervendrán el médico Sánchez Yebra y una segunda ponencia a cargo de la psicóloga de la Asociación contra el Cáncer Elisa Alonso.

Ésta abordará los aspectos psicológicos relacionados con la enfermedad, un tema especialmente relevante en una dolencia asociada (por mucho que las experiencias recientes de miles de mujeres indiquen lo contrario) a la muerte, al sufrimiento etc.

Derribar el miedo

"En este campo la labor educativa es central, las mujeres tienen mucho miedo e intentaremos derribar esos mitos, que las mujeres afronten el cáncer de mama como lo que es, una enfermedad grave pero una enfermedad que puede curarse".

Por su parte, el facultativo expondrá a los asistentes las técnicas de seguimiento de las enfermas y la prevención en el caso de las mujeres sanas.

Y es que todas las campañas se centran en que la prevención es la verdadera clave: de media, los índices de supervivencia de las mujeres diagnosticadas rondan el 82%, un porcentaje que se eleva hasta superar el 90% si el tumor se detecta en los estadios iniciales. Así, los expertos recomiendan relativizar y también prevenir para poder curar.