“Os galegos somos a antítese do toureirismo”. Esta frase de Castelao fue sólo una de las consignas con las que los más de 200 asistentes protestaron contra la feria de toros en Pontevedra en una marcha que recorrió el centro de la ciudad y acabó en la plaza de toros vigilada por un amplio dispositivo policial. También al grito de “a tortura non é cultura” los participantes exigieron la prohibición de la cita, al igual que la abolición de la tauromaquia en todo el Estado.
La manifestación volvió a coincidir, como sucedió durante los años anteriores, con la primera de las jornadas taurinas que se llevan a cabo en el coso de San Roque durante el mes de agosto. Colectivos ecologistas, representantes de asociaciones políticas y vecinos se reunieron en la Praza da Peregrina para iniciar un recorrido por las calles de la ciudad. Algunas decenas de participantes se dirigieron hacia la plaza taurina, vigiladas por un cordón policial que impidió su acceso al recinto.
Pancartas
Antes de emprenderlo los asistentes realizaron una concentración de varios minutos mostrando los diversos lemas que les acompañaron durante la protesta. Además enseñaron imágenes con el estado en el que quedan los toros tras las corridas, al tiempo que se preguntaba en las pancartas “¿De verdad pensáis que no sufren?”.
Asimismo desde los colectivos contrarios a la tauromaquia recordaron que el fenómeno de las peñas es “paralelo” a la cita en la plaza de toros, pero no excesivamente vinculado a ella. “Hai moitas peñas pero en realidad as afecionadas ás touradas non suman moita xente, posto que o importante é divertirse na rúa e non pagar para ver torturar”, apuntaba uno de los portavoces de los colectivos que organizaron la manifestación, Rubén Pérez.
