Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la Comisaría Provincial de Pontevedra han procedido a la identificación y detención de A.B.J., de 21 años, vecina del poblado de O Vao, en Poio, con antecedentes policiales, como presunta autora de un delito de atentado a agente de la autoridad, resistencia y daños en vehículo policial. En este enfrentamiento participaron también otros miembros de la familia de esta joven que en su día ya fueron detenidos.

Los hechos se remontan al pasado día 8 de marzo cuando una dotación procedía a detener a M.S.M., de 23 años de edad acusado de atentado a agente de la autoridad y daños en el vehículo policial, así como lesiones a los dos agentes.

Sin carné de conducir

Durante esa intervención en la que el detenido conducía sin permiso una furgoneta en cuyo interior trasladaba a varios miembros de su familia entre los que se encontraba su hermana, también detenida el día 16 de marzo, que fue junto con la detenida ayer una de las agresoras de los agentes y de las causantes de múltiples daños en el vehículo policial.

Por todo ello se iniciaron las gestiones para su localización que concluyeron este lunes, día 27 de abril, sobre las 12.40 horas de la mañana cuando los agentes policiales la interceptaron en las inmediaciones del poblado de O Vao.

Identificada

Una vez identificada y tras reconocer a los agentes su participación en la agresión a los agentes utilizando para ello una barra de hierro con la que también causó daños al vehículo policial.

Por todo ello los agentes procedieron a su detención y posterior traslado a dependencias policiales para ser oída en declaración en relación con estos hechos.

La detenida será puesta en las próximas horas a disposición de la autoridad judicial.

Vigilancia

Durante las últimas semanas tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil está llevando a cabo una estrecha vigilancia en el entorno del poblado gitano de O Vao. Se han hecho ya varias redadas y se controla a todas las personas que entran y salen de este lugar.

Según fuentes policiales, estos controles rutinarios se van a seguir realizando durante las próximas fechas con el fin de eliminar el trapicheo de droga y la venta de objetos robados que se produce.

De hecho, las mismas fuentes apuntan que ya se deja notar una reducción de personas que van a buscar su “dosis”, especialmente cuando hay un coche policial cerca.