El alcalde de Poio, Luciano Sobral, confirmó ayer que a la espera de una reunión con los abogados que llevan el caso de la sentencia sobre los realojos de Caritel, todo apunta a que presentarán un recurso. “Temos que estudiar o dictame co abogado, porque anula os contratos coas familias xitanas e, sen embargo, admite a compra das vivendas”, subrayó el regidor, al tiempo que recordó que lo que se había cuestionado desde un principio era si la compra de una propiedad por parte de una administración local en otro municipio era legal o no. “A legalidade da adquisición está recoñecida na sentencia. Por iso queremos saber cal é o motivo polo que se anulan os contratos de aluguer e non a compra”, matizó.

La anulación del contrato del arrendamiento se debe, según interpretó Sobral, a dos razones. La primera es su finalidad. “Segundo se deriva da sentencia, parece que se este aluguer se fixera cunha intención distinta a dos realoxos e reinserción non habería ningún problema”, subrayó. El segundo motivo es la inexistencia de un convenio de seguimiento de integración de las familias gitanas en Caritel, que tendría que estar firmado por las dos administraciones locales implicadas, la Xunta y los representantes de la Fundación del Secretariado Gitano. El recurso de la sentencia supondrá el traslado del litigio al Tribunal Superior de Xustiza, lo que podría derivar en prolongar el proceso entre uno y dos años más.

El responsable del gobierno local se mostró dispuesto a reunirse con el alcalde de Ponte Caldelas para abrir una vía de negociación. “Nós seguimos defendendo a posibilidade de chegar a un acordo e de que a mesa de integración, creada pola Xunta, siga funcionando para desbloquear o tema. Co cambio de goberno autonómico non sabemos en qué dirección se avanzará”, añadió Sobral.

Otro de los proyectos que ha quedado pendiente con la Xunta y concretamente con la Consellería de Vivenda del bipartito es la creación de un poblado de transición en O Vao, ámbito en el que sólo se produjeron avances administrativos. El responsable del gobierno local de Poio aseguró ayer que desconocen si ha quedado contratada la posibilidad de construir estas viviendas y lo único firme es la adquisición de la parcela donde se prevé levantar el poblado de transición y donde se ha ubicado ya una vivienda en la que residen los gitanos que habían sido realojados en Monte Porreiro y que finalmente tuvieron que regresar a O Vao ante la oposición de los vecinos del barrio pontevedrés.