El gobierno local ha decidido adelantar las tareas de limpieza y acondicionamiento de las dos únicas playas del municipio, la de Placeres y la de Pontesampaio, para permitir su utilización en la próxima Semana Santa y mantenerlas en uso hasta el verano. De este modo, se ha ordenado ya acometer esos trabajos y ayer mismo una brigada de limpieza trabajó en el arenal de Placeres. El concejal Raimundo González Carballo explicó ayer que el objetivo es “tener ambas playas en perfectas condiciones de uso con la llegada de la primavera y el buen tiempo, además de prepararlas para la Semana Santa y el resto de la temporada”.
Un tractor y varios operarios actuaron ayer en Placeres y en los próximos días se hará lo mismo con la de Pontesampaio. La intención es mantener estos trabajos durante toda la temporada, además de realizar labores de mejora del mobiliario urbano, que suele registrar desperfectos durante el invierno.
Aportes de arena
La playa de Placeres registra un uso no muy numeroso, pero sí es más utilizada la de Pontesampaio, en la desembocadura del río Verdugo, a donde acuden los vecinos de la zona y que en numerosas ocasiones requiere de un aporte de arena.
Paralelamente, el concello trabaja en la ejecución de la playa fluvial del río Lérez, con el fin de ampliar el exiguo parque de arenales del concello. En este caso, la empresa adjudicataria trabaja en acondicionar el terreno para proceder a la colocación de la arena, después de que ya se hubieran realizado numerosos trabajos dentro del cauce del río, para crear un muro que sustente esa arena y evitar que se la lleve la corriente.
Además, se ha creado una pasarela peatonal de madera que discurre bajo uno de los pilares del puente del ferrocarril en Monte Porreiro. Esta pasarela enlaza la futura playa fluvial con el paseo que recorre la orilla del Lérez.
