La secretaria general de Instituciones Penitenciarias, Mercedes Gallizo, asegura que sigue abierta la investigación en torno al funcionario que vigilaba el sistema de control por GPS de Maximino Couto. No obstante, reconoció que no le gusta "buscar culpables" y defendió que el sistema de vigilancia por GPS funciona "razonablemente bien".

"A mí personalmente no me gusta mucho buscar los chivos que espíen la culpa que todos tenemos en cierta medida", respondió Gallizo tras ser preguntada sobre la posible incoación de algún expediente al trabajador que se encontraba en la Unidad Central de Vigilancia Electrónica en el momento en que el maltratador suicida cometió el homicidio. Un crimen que ejecutó cuando disfrutaba de un permiso penitenciario.

Tras subrayar el desarrollo de la investigación para "detectar los errores" y las mejoras que pueden experimentar todos los servicios de Prisiones, Gallizo defendió que el sistema de control telemático mediante estos brazaletes electrónicos funciona "adecuadamente" y "razonablemente bien". "Aunque todo puede estar sometido en un momento dado a un pequeño fallo, creo que funciona razonablemente bien", remachó.

Respecto a Couto, que se quitó la vida en A Lama en la madrugada del miércoles, indicó que eleva a 16 el número de suicidios producidos en las cárceles españolas en lo que va de año. Esta cifra, dijo, refleja el "esfuerzo" de los funcionarios de la Administración penitenciaria por evitar este tipo de sucesos.

Gallizo comparó estos datos con los registrados en Francia. Allí estos casos sobrepasan el centenar.

Valoró así la importancia del programa de prevención en las cárceles españolas, aunque recordó que "no siempre se detectan estas ideas porque no se puede entrar dentro de las cabezas de las personas". Agregó que estas tendencias de carácter suicida son "habituales" en delitos de violencia en el ámbito familiar.

Traslado

En concreto, sobre Couto apuntó que los servicios médicos no detectaron ninguna alteración depresiva en su estado de ánimo. Concluyó que se encontraba a la espera de ser trasladado a otro centro penitenciario ya que en los casos que adquieren "una gran relevancia pública, es mejor que el interno no permanezca en el lugar de los hechos porque puede traer problemas para él y su entorno".

Por su parte, el delegado del Gobierno para la violencia de género, Miguel Lorente, atribuyó el incremento de "la violencia en la materialización del crimen" en los casos de maltrato machista a una "clara reacción" frente al avance en la lucha contra esta lacra y en la igualdad de género. Insistió en que "el sistema GPS funcionó" en el caso de Maximino Couto, que asesinó a su pareja durante un permiso carcelario cuando cumplía condena por maltratar a su ex mujer. Pero recordó que un nuevo sistema multialarma mejorará la seguridad de las mujeres amenazadas.