ano martínez  O_Salines

La Diputación de Pontevedra logró congregar ayer a unas 2.000 personas (1.700 motos) en la primera concentración motear organizada por esta entidad provincial. La cita sirvió también para que los conductores volviesen a exigir la colocación de más guardarraíles seguros para los motoristas, y para que la Diputación les anunciase las carreteras en las que se van a colocar éstos en los próximos meses.

El presidente de la Diputación, Rafael Lourizán, explicó que durante 2008 la entidad provincial va a invertir un millón de euros en la instalación de quitamiedos con doble bionda. Ya se han colocado en la carretera que une Carracedo (Caldas de Reis) y Catoira, y en las próximas semanas se empezará la instalación en la carretera de Barrantes a Armenteira.

El esfuerzo inversor de la Diputación para la colocación de quitamiedos seguros se centrará también en la comarca de O Condado, pues se colocarán en las vías que unen As Neves con Ponteareas y A Cañiza con Arbo y Crecente. Louzán señaló que este esfuerzo inversor de la Diputación para la supresión de los guardarraíles de un solo poste sólo puede compararse con el de la Diputación de Valencia.

"Nosotros vamos a gastar un millón de euros en este tipo de obras, cuando el presupuesto de todo el Estado para este fin es de ocho millones", declaró Rafael Louzán en el merendero de O Castro (Poio), donde terminó la ruta motera de ayer, que había salido de Catoira.

Los conductores entienden que la situación ha mejorado mucho en los últimos meses, pero que todavía queda mucho camino por recorrer. El presidente de la Plataforma Motera para la Seguridad Vial, Manuel Picón, indicó que en las carreteras nacionales apenas hay ni un solo metro de guardarraíles con doble bionda, a pesar de tratarse de vías muy utilizadas por los motoristas. A la pregunta de qué carreteras necesitan estos quitamiedos con mayor urgencia, Picón citó las nacionales que unen Vigo y Santiago de Compostela y Pontevedra y Ourense, y la autonómica de Baiona a A Guarda. Manuel Picón elogió el trabajo de la Diputación.

"Hace un mes se cayó un chico en la carretera de Carracedo a Catoira y sólo se fracturó una pierna porque chocó contra la doble vionda. De no ser por ella ahora estaría muerto. La inversión en esa carretera ya está amortizada", señaló.

Según los datos del presidente de la Plataforma Motera para la Seguridad Vial, en 2007 murieron 20 motoristas en carreteras de la provincia de Pontevedra, de los cuales 12 fallecieron tras estrellarse contra quitamiedos. En 2008, han perdido la vida 12 moteros, de los cuales 7 colisionaron contra los polémicos guardarraíles de un solo poste.

De la Xunta de Galicia espera que cumpla los compromisos establecidos en su pionero plan de seguridad vial.

Convocan una concentración para el día 13 _en Pontevedra

Las asociaciones moteras han convocado una concentración para el sábado, 13 de diciembre, que se celebrará simultáneamente en todas las ciudades de España con Subdelegación del Gobierno. Pontevedra será, por tanto, uno de los lugares en los que los motoristas se concentren para exigir la sustitución de las actuales "cuchillas" que sujetan los viejos quitamiedos. En la concentración de ayer también se habló mucho de los guardarraíles instalados en la flamante autovía de O Salnés, pues sólo en ciertos tramos se ha colocado el de doble vionda.

"Han puesto los mismos que en los años setenta", señaló Picón. Rafael Louzán, por su parte, dijo que "la Xunta se comprometió a muchas cosas, pero no han hecho nada, y el ejemplo más claro está en la autovía de O Salnés".

La concentración de ayer fue un éxito de participación, pues se sumaron a la caravana asociaciones de toda la provincia -incluidas varias de O Salnés- e incluso de A Coruña. El presidente del motoclub "Pemento Racing" de Padrón, Miguel Batallán, manifestó que en su opinión "el problema es que la ubicación de los nuevos quitamiedos se elige en los despachos y no en la carretera".

En este sentido, ensalzó el procedimiento de la Diputación, que consensuó con las asociaciones la instalación de la doble vionda en las carreteras provinciales.

Uno de los motivos por los que las administraciones se oponen a la instalación exclusiva de los nuevos quitamiedos -que suelen ponerse sólo en las curvas y lugares donde es más fácil caerse- es el económico, pues un metro de guardarraíl de un solo poste puede costar unos 12 euros, mientras que el de doble vionda puede llegar a los 24.