Sinaí Giménez, presidente de Pueblo Gitano, asegura que tanto a la organización que él dirige como las propias familias afectadas por los realojos de O Vao se han cansado de esperar una solución. Por este motivo, da un mes de plazo a la Comisión encargada de encontrar una vivienda para las tres familias gitanas realojadas en Monte Porreiro o de lo contrario regresarán definitivamente a la urbanización pontevedresa.

Sinaí Giménez explicaba ayer que siempre "aposté por el diálogo" pero asegura que el compromiso que les dio la Xunta cuando se fueron de Monte Porreiro "era que en un mes tendríamos otras tres viviendas en un otros lugares de la provincia". El presidente de Pueblo Gitano lamenta que "a día de hoy esto no se ha cumplido y lo que no puede ser es que tres familias se queden sin hogar cuando ya tienen uno digno", de ahí que se planteen regresar si no se resuelve la situación en este plazo razonable de un mes.

El líder del colectivo calé recuerda que dos de las familias que regresaron en el mes de mayo de Monte Porreiro están viviendo, desde entonces, en un hotel y asegura "que a nadie le gusta vivir durante tanto tiempo en una habitación". La tercera reside en una chabola sobre la que está pendiente una orden de derribo que se ejecutará el día 18, algo que también podría precipitar su regreso a Monte Porreiro si antes no se encuentra una solución. Asegura que esta medida "se tomaría en último caso".

Giménez recordó, además, que lanzó una propuesta a los vecinos de Monte Porreiro para que aceptaran al menos el realojo en la calle Portugal de la familia cuya infravivienda está pendiente de derribo, pero "no quisieron aceptarlo" y ahora asegura que, ante la falta de soluciones que aporta la mesa negociadora, lo que se plantean "es que vayan las tres".

Asimismo, explicó que la estrategia que siguen para preparar el regreso de los realojados al barrio pontevedrés pasa por las actuaciones que han iniciado ante el juzgado. Primero, señaló, la denuncia "que ha llevado a los vecinos de Monte Porreiro a declarar ante el juzgado como imputados"; segundo la "petición de penas de hasta seis años de cárcel por una serie de delitos de los creemos que son culpables" y, tercero, la petición de medidas cautelares que impidan la realización de manifestaciones en un radio de 500 metros en el entorno de las viviendas de las familias realojadas. Giménez asegura que esta "orden de alejamiento" ya se ha adoptado con anterioridad en otros puntos de la geografía española.

Orden de alejamiento

Pueblo Gitano está convencido que en un plazo de "entre 20 días y un mes" tendrá en sus manos esta orden de alejamiento dictada por el juez, ya que considera que "está suficientemente probado que las familias gitanas se fueron de Monte Porreiro por miedo" y por las "manifestaciones violentas de los vecinos que secuestraron la libertad de estas personas a vivir donde ellas quieran".

Sinaí Giménez aseguró defenderá al Pueblo Gitano "por encima de subvenciones y partidos políticos" y exige que después de cuatro meses esperando les den una solución definitiva.