El presidente de la Asociación del Pueblo Gitano, Sinaí Giménez, anunció ayer que este colectivo se presentará como acusación particular contra los vecinos del barrio de Monte Porreiro imputados por Fiscalía a raíz de las movilizaciones que se produjeron en la urbanización tras los realojos de tres familias gitanas en procedentes del poblado de O Vao.

Asegura Sinaí Giménez, que la asociación que el preside no se conformará "con la imposición de multas" a los imputados y "señala que pedirán penas de cárcel" para los vecinos a los que acusan de delitos contra las libertades fundamentales, amenazas y coacciones, por las manifestaciones que se realizaron después del traslado de los chabolistas a Monte Porreiro.

El presidente de Pueblo Gitano acudió ayer a prestar declaración ante el juzgado de instrucción número 1 de Pontevedra, después de que esta sala abriera diligencias previas a raíz de que Fiscalía imputase a seis vecinos por un presunto delito de coacciones a las familias gitanas. Cabe recordar que Fiscalía actuó después de recibir previamente una denuncia de la propia asociación que dirige Sinaí Giménez.

Asimismo, la juez también tomó declaración a miembros de las familias realojadas en Monte Porreiro.

Giménez explicó, a la salida del juzgado, que ratificó la denuncia que realizó en su día contra los vecinos del barrio pontevedrés. Para el dirigente de Pueblo Gitano, a estas tres familias "se le mantiene secuestrado su derecho a vivir en donde quieran, a día de hoy tienen las llaves de unos pisos a los que no pueden ir por miedo a que las manifestaciones violentas y las amenazas que se dijeron entonces se puedan volver a llevar a cabo".

Además, Sinaí Giménez abrió una inquietante posibilidad ante el actual clima de tranquilidad que se vive en el proceso de realojos. Aseguró que, mientras se intenta buscar una solución residencial a estas tres familias, "todas las posibilidades están abiertas" incluido un regreso a las viviendas de Monte Porreiro.

De hecho, Giménez anunció que pidió a la juez que instruye el caso que dicte una "orden de alejamiento" para que no se puedan celebrar concentraciones y manifestaciones en un radio de 500 metros alrededor de las casas de las familias realojadas en la urbanización pontevedresa.

Ante el compromiso que dieron en su día los realojados a Vicepresidencia de no regresar al barrio para facilitar así buscar otra solución al problema, Sinaí Giménez aseguró que "los compromisos son válidos cuando todo lo que dice la otra parte que va a hacer se cumple" y señaló que, en el caso de que no se encuentre una vivienda para las familias gitanas podrían plantearse regresar a Monte Porreiro. Además, insiste en que si la integración del Pueblo Gitano en Galicia "depende de partidas de 18.000 euros como hasta ahora" y no se destinan más medios, se plantearán dejar la Comisión. No obstante, se mostraron decididos a seguir trabajando en esta mesa de diálogo.