El Consello de la Xunta dio luz verde ayer al acuerdo alcanzado hace días con las cofradías de la ría de Pontevedra según el cual se prorrogarían las subvenciones destinadas a la estabilización de los bancos marisqueros.

De esta forma el Gobierno gallego realiza otros tres meses el programa iniciado en el pasado otoño y lo prolonga hasta el 30 de septiembre. Las ayudas aprobadas ayer superan la cantidad de 1,3 millones de euros. La vigencia del protocolo iniciado en 2007 entre el Ejecutivo y los colectivos de Pontevedra, Raxó y Lourizán estaba fijada hasta el próximo día 30 de ese mes.

Ahora se amplía por tercera vez desde que empezó a aplicarse y será revisado de nuevo en agosto tras analizar el estado del banco de Placeres, catalogado como zona C en abril del pasado año.

A pesar de que recientemente entró en funcionamiento un nuevo sistema de depuración para la zona, lo cierto es que de momento las condiciones que sigue presentando el arena desaconsejan variar la clasificación. Por ese motivo se dan tres meses más para las subvenciones destinadas a los trabajadores de ese banco. Estos, como contraprestación, desarrollan tareas de limpieza y traslados de siembra de bivalbo desde las zonas de baja producción a otras de mejor crecimiento y acondicionamiento del substrato.

Placeres lo explotan miembros de las tres agrupaciones que integran la bahía pontevedresa. Serán también ellos los que distribuyan los trabajos realizados al amparo del convenio suscrito con la administración autonómica, en concreto con la Consellería de Pesca. Ésta también dio el visto bueno a otras prórrogas de similar cantidad para los afectados por la catalogación de tipo C en el municipio de Baiona.