Un agitado fin de semana en la "movida" de la ciudad se saldó con un total de seis intervenciones de la Policía Nacional a consecuencia de sendas reyertas callejeras y con 11 locales de copas denunciados por infracciones de diversa índole en unas actuaciones de inspección que llevó a cabo la Policía Local para el control de los efectos nocivos de la diversión nocturna.

La ingesta masiva de alcohol estuvo relacionada con la primera de las peleas en las que se vieron obligados a actuar los efectivos de la Comisaría. Se produjo sobre las once de la mañana del sábado, en una bocatería de la avenida de Buenos Aires, cuando una persona requirió la presencia policial por una reyerta en el exterior del local. Al llegar la dotación policial, comprobó que el enfrentamiento se había iniciado cuando una persona, al parecer en estado ebrio, había insultado a otro joven que se encontraba en el establecimiento y que presenta una minusvalía que le obliga a utilizar una silla de ruedas. El comentario de esta persona provocó que varios de los clientes de la bocatería salieran en defensa del joven, resultando con lesiones en el rostro uno de ellos, aunque no quiso ser atendido pese al ofrecimiento de la patrulla de la Policía y de una ambulancia que se había desplazado al lugar de los hechos.

Agresión con un vaso

La segunda de las peleas se produjo ya en la noche del sábado al domingo día 6. Sobre las cuatro de la madrugada un individuo resultó agredido con un vaso por otra persona que a continuación se dio a la fuga. Según informan fuentes de Comisaría, los agentes consiguieron identificar a uno de los testigos de los hechos, mientras que en estos momentos se mantienen abiertas las investigaciones para identificar plenamente al agresor. Apenas unos minutos después, a las 4,30 horas y en la plaza de Valentín García Escudero, varios agentes que intentaban poner fin a una pelea entre dos jóvenes resultaron agredidos por una tercera persona.

Sobre las 7,20 del domingo, otra patrulla policial tuvo que desplazarse a una cafetería ubicada en la Estación de Autobuses ya que una empleada manifestaba que un individuo estaba causando problemas. La presencia de la dotación policial permitió solventar la situación, que no fue a mayores tras identificar al autor de los hechos y realizó una propuesta de sanción por infracción a la Ley Orgánica 1/92, de protección de la Seguridad Ciudadana.

Por último, el día 7 de abril, un mismo grupo de personas que se encontraban en una discoteca de la avenida de Vigo obligó a actuar en dos ocasiones sucesivas a una patrulla de la Policía Nacional.

Tenencia de arma blanca

La primera sobre las 4,10 horas, cuando los agentes identificaron a un individuo que había propinado varios puñetazos a otra persona. Una hora más tarde tuvieron que actuar de nuevo y volvieron a identificar a este mismo sujeto, en compañía de otros dos. Los tres se encontraban en el interior de un vehículo en el que había huido tras haber golpeado a otro cliente de la discoteca. En esta segunda ocasión, el conductor del turismo fue propuesto para una sanción administrativa por tenencia de arma blanca y de sustancia estupefaciente. Otro de los ocupantes del coche también se enfrenta a una sanción por alteración grave de la seguridad ciudadana.

Por su parte, la Policía Local de Pontevedra llevó a cabo en los últimos días una serie de inspecciones para comprobar otros "desmanes" de la movida, en este caso la de los propios locales de copas. Según explicó el concejal de Seguridade Cidadá, Guillerme Vázquez, el pasado jueves y el sábado se realizaron un total de 11 inspecciones en bares y pubs y todos ellos terminaron denunciados por alguna infracción. En cuatro casos, las faltas eran especialmente graves y se ordenó su precinto. Están ubicados en Padre Luis, Buenos Aires, Benito Corbal y Barón. A un quinto se le precintó el limitador acústico y a los otros 6 la Policía Local les da un plazo de cinco días hábiles para corregir estas deficiencias.