"Lo mejor es que el equipo ha querido ganar y ha demostrado que puede hacerlo", declaró ayer el entrenador del Pontevedra, Javi Gracia, quién visiblemente satisfecho por el resultado del encuentro bromeó al término del partido asegurando que uno de los "suspiros de alivio" que se escucharon cuando los locales marcaron el gol fue el suyo.

Gracia evaluó el encuentro como un ejemplo de la lucha que los granates están dispuestos a plantear en cada uno de los partidos que restan de liga.

Subrayó especialmente el apoyo ofrecido ayer por la afición, que "ha estado de diez; con el empuje que tenemos detrás el equipo no va a fallar", afirmó el míster.

En el análisis del partido el entrenador valoró principalmente la primera parte, que "fue muy disputada". En esta primera mitad, dijo Gracia, el Pontevedra trató de llevar la iniciativa y el peso del partido, si bien tuvo dificultades porque el Atlético también jugó al fútbol. Fue en la segunda cuando los granates se esforzaron en tener más fluidez que los rivales en el toque de balón y en "elaborarnos", como explicó Javi Gracia.

En cuanto al rival criticó las "paradas continuas" y las constantes pérdidas de tiempo buscadas por los rojiblancos. "Se ha jugado muy poco tiempo real de partido en la segunda parte", manifestó Gracia.

"El que insiste y lo quiere realmente al final consigue una victoria", apuntó el míster, para quiEn la de ayer fue "realmente una victoria importante", a la vista del grupo.

Sobre el regreso de Charles el entrenador celebró que "la gente se vaya recuperando, porque entre todos tendremos más oportunidades". En conjunto, "todos los que han participado lo han hecho muy bien", dijo el míster sobre sus jugadores.