Con un 31-3 se va el Campus Ourense Coosur a Bilbao, donde el próximo domingo, a las 12.00 horas, abordará el partido que le separa de un histórico ascenso a la División de Honor B de rugby. El conjunto ourensano se apuntó una victoria holgada sobre el Universitario, que ahora se aferra a su campo, donde ya remontó un resultado desfavorable contra el Rugby Ferrol en la eliminatoria previa, para invertir los pronósticos.

Pudo ser más amplia la ventaja obtenida por el Campus. El partido se abrió con un toma y daca para conocerse mejor. Los equipos llegaban con sus referencias, se sabía en Ourense de la dureza de los bilbaínos, pero nada como probarse para subrayar las carencias. El conjunto entrenado por David Monreal estuvo muy bien adelante, asegurando balones en touches y melés, obligando a los visitantes a aplicarse únicamente en defensa.

El resultado al descanso reflejó la superioridad local, un 19-3 con tres ensayos de Abraham, Rucho y Andy. Las gradas del recinto universitario registraron una de las mejores entradas de su historia, con cerca de medio millar de espectadores, y la comunión entre el equipo y la afición también tuvo traducción en el tanteador.

El Universitario convirtió un golpe de castigo para evitar el cero. Dos nuevos ensayos de Yago en el tramo inicial de la segunda parte establecieron el resultado final. Quizás por la relajación, viendo claro el resultado, los balones empezaron a caerse y el Campus no consiguió abrir una brecha mayor.

El Ferrol, subcampeón de la Liga Gallega por detrás de los ourensanos, se presentó con 11 puntos de colchón en El Fango, que también dispone de una superficie de césped sintético, y acabó eliminado por cuatro puntos. Es el dato que ronda sobre los jugadores del conjunto ourensano para conjurar el exceso de confianza. Toca semana de trabajo con humildad y vídeo para subsanar los errores.